Netflix vuelve al cole con El cuerpo en llamas

En mayo de 2017 la Guardia Urbana de Barcelona saltó a los titulares. No había resuelto ningún caso importante, ni tampoco se había producido ningún altercado en la ciudad en el que tuviesen que haber intervenido. Lo que ocurrió fue que varios de sus agentes estuvieron implicados en un caso que se ha terminado convirtiendo en uno de los más mediáticos de nuestro país.

El 4 de mayo de 2017 el cadáver de Pedro Rodríguez, un agente de la Guardia Urbana de Barcelona de 38 años, fue encontrado carbonizado en un coche quemado cerca del Pantano de Foix. Tras un mediático juicio, Rosa Peral, su pareja en ese momento, y Albert López, su amante, fueron declarados culpables de asesinato con traición y condenados a 25 y 20 años de cárcel respectivamente. Se da la paradoja de que todos ellos compartían profesión, y el triángulo amoroso que formaban había protagonizado los principales escándalos del cuerpo de la Guardia Urbana en los meses anteriores al crimen.

El crimen que nunca dejó de ser mediático

Aquel caso fue bautizado por la opinión pública como el crimen de la Guardia Urbana y ahora está a punto de volver. Porque Netflix ha anunciado que será el 8 de septiembre cuando vea la luz El cuerpo en llamas, la serie en la que Ursula Corberó y Quim Gutiérrez se han metido en la piel de los asesinos. La miniserie de trama criminal ya ha concluido un rodaje que se ha localizado principalmente en Barcelona y otros municipios de la provincia.

Junto a la pareja protagonista, completan el reparto principal José Manuel Poga (Fugitiva) que interpreta a Pedro, la víctima; Isak Férriz (Bajocero, Gigantes, Feria: la luz más oscura) y Eva Llorach (Quién te cantará, Élite, Campamento Albanta), entre otros.

Dirigida por Jorge Torregrossa (Fariña, Intimidad), El cuerpo en llamas es una miniserie llena de misterio, violencia y escándalos sexuales, cuya trama adentrará a los personajes en una red de relaciones tóxicas, engaños, escándalos sexuales y violencia, según explican desde la plataforma.