| 29 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Julio Solaz, alcalde de La Yesa
Julio Solaz, alcalde de La Yesa

Julio Solaz: "Quiero que la vela que mantiene viva La Yesa siga encendida"

El alcalde de La Yesa (90 habitantes), localidad ubicada en la comarca de la Serranía, analiza la actual situación de su municipio y el problema que viven los pueblos de interior.

| Noel Rodilla Municipios

EsdiarioCV inicia con Julio Solaz una serie de entrevista a alcaldes de municipios que hemos querido denominar "emergentes", por las posibilidades que ofrecen en todos los sentidos, aunque a día de hoy luchan contra la despoblación. 

Muy cerca de la frontera natural de la provincia de Teruel, La Yesa mantiene viva la esperanza de vida en el interior de la provincia de Valencia. Codiciada por el Cid Campeador, allá por finales del siglo XI en el "Cantar del Mio Cid", el municipio de la comarca de La Serranía cuenta con una población diaria de 90 habitantes aunque en épocas estivales se convierte en 600.

El municipio más alto de toda la provincia cuenta con una gran riqueza gastronómica, el nabo fino, un producto autóctono, y muy valioso, que los agricultores de la zona tienen como emblema para seguir bombeando la sangre de una tierra heredada en tiempos romanos.

¿Cómo describes la situación actual de la Serranía?

Es una zona muy extensa, pero muy desconocida. Mucha gente del litoral de Valencia no sabe que la provincia tiene serranía. A nivel social somos muy desconocidos. Tenemos mucha riqueza, pero desgraciadamente estamos en un riesgo de despoblación real. Estamos apagándonos. No hay relevo generacional y eso nos hace convertirnos, en muchos casos, en una Marina D'or. Estamos pasando de una zona agrícola, con unas cualidades extraordinarias para el cultivo, a ser residencia de verano en una zona de secano. Es una pena.

¿La difícil situación del sector primario puede ser uno de los causantes?

Totalmente. Desde los años 60, con el éxodo rural, se ha grabado a fuego que en el pueblo no hay futuro. Y no es así. En los pueblos hay mucho futuro. Tenemos unas cualidades similares a la ciudad. Tenemos una conectividad y carreteras excelentes. Estar a 80 kilómetros de Valencia, una hora en coche, es un lujo. El trabajo en esta zona es el mismo que en zonas de más población y no solo eso, si no que aquí hay más (trabajo) y además, con menos costes.

Entiendo que aquí no debe haber un político. Aquí tiene que haber personas que peleen para que este pueblo continúe vivo todos los días del año

¿Cuál es la actualidad de La Yesa?

La actualidad de La Yesa es complicada. Tenemos muchas viviendas vacías, pero no desocupadas. Esto es un problema ya que, es un caldo de cultivo que agrava la situación. No vivir en el pueblo y crear una estacionalidad en el municipio hace que no tengamos un mercado de vivienda. Cada vez somos menos habitantes porque los renacidos, hijos o nietos de yesanos que culturalmente no quieren establecerse permanentemente aquí, tampoco permiten esa oferta de vivienda vacía. Esta situación terminará con el cierre de negocios, servicio médico y desaparición de escuela. Nos estamos apagando como una vela y desgraciadamente no hay otra vela al lado para seguir manteniéndola. Quiero que la vela que mantiene viva La Yesa siga encendida.

¿Cuál es la economía de La Yesa?

Trabajo hay de sobra. Ahora mismo hay mucho empleo en la construcción, fontanería o agricultura, aunque en este último sector es más complicado porque no se obtienen beneficios rápidamente. El trabajo en despachos es excelente. No tenemos ningún problema. Tenemos conexión de fibra óptica de excelente nivel.

¿Cuál es el deseo de cara al futuro?

Al futuro le pido que el vecino se ponga la mano en el corazón y diga: "Soy yesano", pero hay que serlo de verdad y mirar por el bien común por encima del capricho personal. Las personas que tienen la capacidad de poner una vela para que no se apague el pueblo, que lo haga. Mi deseo es que los vecinos entiendan la situación en la que estamos y que puedan dar la vuelta.

¿Cómo es el día a día en el municipio?

Es una población mayor, aunque desde la pandemia ha aumentado el número de vecinos, pero el día a día es muy interesante. Para ser un consistorio que trabaja para 90 personas, no paramos. Es un pueblo muy cercano. Si tienes cualquier necesidad, los vecinos te ayudan. La suerte de poder parar a un alcalde por la calle y trasladarle las necesidades que puedas tener no ocurre en todos los sitios. Es una situación muy cercana.

¿Cuál es su filosofía como alcalde?

De vecino. Siempre he querido que sea así. Entiendo que aquí no debe haber un político. Aquí tiene que haber personas que peleen para que este pueblo continúe vivo todos los días del año. Si esto no es así, dejará de ser un pueblo para convertirse en una residencia de verano. Con el trabajo que estamos haciendo ahora mismo no echas de menos esa situación. Todos los días hay vida en las calles.

En 2024 se creará una línea desde Alpuente hasta Villar del Arzobispo, pasando por La Yesa, para que los jóvenes puedan ir al instituto. Ellos tienen muy claro que no abandonarán esta zona y quieren dar un gran impulso

¿Cómo es la relación del Ayuntamiento con el resto de administraciones?

Conocen la situación y siempre están a tu lado, pero desgraciadamente no pueden tirar mucho de la cuerda. Por ejemplo, el transporte, por mucho que insistan, ninguna compañía quiere introducir una línea si no hay gente. Hay alternativas como taxi a demanda para poder desplazar a la población. En 2024 se creará una línea desde Alpuente hasta Villar del Arzobispo, pasando por La Yesa, para que los jóvenes puedan ir al instituto. Ellos tienen muy claro que no abandonarán esta zona y quieren dar un gran impulso.

Un reclamo gastronómico de La Yesa es el nabo fino, ¿qué se puede saber de este producto?

Es un producto único de la zona. Por las condiciones, climatológicas, altitud y situación geográfica, hace que el nabo tenga unas características de tamaño y calidad únicas. desde la Universidad de Valencia están trabajando mucho y se ha convertido en especie de conservación, además, se está promoviendo para que se pueda comercializar. Ahora mismo estamos celebrando una feria de este producto para que se dé más a conocer.