Wallapop da las “GRACIAS” a los miembros de su comunidad

Hablar de Wallapop supone referirse a la sostenibilidad en cuanto a que, durante los últimos 10 años, esta plataforma ha permitido a sus usuarios comprar y vender una amplia variedad de artículos de segunda mano, de forma rápida, sencilla y segura. Eslóganes de esta firma, como “lo hecho, hecho está” o “si no lo usas, súbelo”, son un llamamiento al consumo responsable.

Es su décimo aniversario, la compañía celebra el impacto positivo generado por su comunidad con el estreno de su primer corto documental titulado “GRACIAS”, escrito por Ana Rujas.

Paso de un modelo lineal a otro circular

El modelo de consumo actual está basado en la economía lineal, es decir, extraer recursos para fabricar productos nuevos que, antes o después, son desechados como residuos. Sin embargo, este ritmo de consumo no es sostenible con la capacidad de reposición del planeta: sólo en España, consumimos todos los recursos que la Tierra tiene capacidad de regenerar en un año en tan sólo 5 meses -concretamente, el 12 de mayo-. Ante esto, la economía circular, que únicamente supone el 7% de la economía global se presenta como un aliado para cambiar nuestra manera de consumir y dar una solución a la crisis climática.

Estudio sobre el impacto medioambiental y económico

La plataforma ha llevado a cabo un estudio en colaboración con Deloitte, que analiza y cuantifica el impacto social y económico que tiene su comunidad en el mundo y la sociedad. Durante el último año, gracias a la reutilización de productos en Wallapop, se logró evitar la emisión de mas de 510 toneladas de CO2, así como el consumo de 20 mil millones de litros de agua, 22 mil toneladas de plástico y 82 mil toneladas de metal.

Todas estas cifras podrían aburrirnos y por eso, el estudio las compara como medidas más cercanas. Por ejemplo, con esas 22 mil toneladas de plástico, se podrían haber construido una línea de flamencos hinchables desde Madrid hasta Oslo.

^{Resultados del estudio realizado por Wallapop en colaboración con Deloitte}

Los datos de Wallapop indican que en el 56% de los casos, los productos anunciados en la plataforma no continuarían teniendo una vida útil si no cambiaran de propietario, es decir, sus dueños pensaban desprenderse de ellos o simplemente tenerlos en casa sin usar.  Esto supone que, en el último año, gracias a las ventas en Wallapop, se ahorraron 31 mil toneladas de residuos, tantos como los que genera el distrito centro de Madrid a lo largo de 5 meses.

Estas compras sustituyen otras de productos nuevos

La tasa de reemplazo, que refleja en qué medida la adquisición de un producto reutilizado realmente sustituye la compra de un producto nuevo, se ha situado en el 82%, según este estudio.

las personas que utilizan Wallapop afirman percibir de media un ahorro del 44% con la compra de artículos reutilizados en vez de nuevos y según el estudio, un usuario promedio de Wallapop ahorraría de media 378€ al año.

La compraventa de coches y móviles de segunda mano en esta plataforma, son los que suponen el mayor logro pues, con su adquisición de segunda mano, se consigue una alta reducción del impacto medioambiental.

Comprar artículos de segunda mano es la mejor forma de conseguir lo que necesitas a un precio mejor, pero no se trata solo del precio. Lo importante es que fomentas un consumo más responsable, porque alargas la vida de los productos y evitas su sobreproducción. Paralelamente, vender productos de segunda mano es decirle al mundo que podemos vivir más con menos.

Puedes encontrar el informe completo en este enlace.