| 26 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse

Fomentar la ignorancia

Podemos la emprende con la princesa Leonor a unos días de celebrar internacionalmente a la Mujer y la Niña en la Ciencia. Podemos, a la suya, que es hacer daño.

| José María Lozano Edición Valencia

Harán muy bien ustedes hoy, en ocuparse -si la tienen- de su pareja, o incluso del incierto desarrollo de las elecciones catalanas y especular con el resultado definitivo, ese cuyo timing ha querido controlar el gobierno autonómico en funciones, que al parecer también advirtió diligente -debe ser un fake- que en éstas se vota una sóla vez. Yo que, naturalmente escribo mucho antes, soy incapaz de apostar hasta con mi mejor lector, en un sentido o en otro.

No quiero tardar, en mi modestia, en sumarme a la petición de cese inmediato del Sr. Iglesias en el Gobierno, así como exigir la responsabilidad que le corresponde a quien lo nombró y lo mantiene. Porque comparto todos y cada uno de los argumentos y reflexiones que contiene el escrito que encabeza ”Cesar la infamia; Pablo Iglesias debe ser sustituido” y suscriben más de dos centenares de personas de bien.

Quedan para el anecdotario (no creo que lleguen a entrar en la historia de España) el ministro candidato, el baile de fechas -y no va por Iceta-, las dudas de los jueces, las del personal sanitario, las solicitudes de baja en las mesas, la violencia contra Vox, el disimulo de los mossos, el protagonismo de Otegi, la negativa de Illa al test … ¡Ah! Y el cordón sanitario de independentistas a quien se asocian en Madrid, con un falso eslabón por el que podría romperse si hiciera falta.

En la enésima muestra de desfachatez, cinismo, oportunismo y maldad en suma, ironizado por su TVE, esa gentuza de Podemos la emprende con la princesa Leonor a unos días de celebrar internacionalmente a la Mujer y la Niña en la Ciencia, precisamente por ir a formarse en un colegio laico de indubitable prestigio científico, mediante candidatura anónima y trasparente, de hábitos austeros y saludables, con especial sensibilidad medioambiental. Nada de eso les importa, ellos a lo suyo, que es hacer daño.

Hemos iniciado  a nivel mundial un proceso de fomento de la ignorancia, tan intencionado por algunos, como peligroso para todos. 

Acostumbrándome a mi jubilación académica, visito de memoria frases famosas o de famosos, pasajes y ensayos relativos a la importancia de la educación en todos los ámbitos sociales. Cuando tengo para mí que hemos iniciado, a nivel mundial, un proceso de fomento de la ignorancia, tan intencionado por algunos, como peligroso para todos. España y la Comunidad Valenciana en particular no son excepción, acaso cabe añadir como característica propia el sobreuso de la subvención.

La supresión del castellano como lengua vehicular en las escuelas catalanas, mientras se incentiva el árabe; el estudio riguroso y completo de la historia y la geografía de cada autonomía, pero en detrimento del conocimiento de la de toda España; las pretendidas imposiciones sobre los padres y los ataques a la enseñanza concertada; la sustitución de asignaturas de Historia de la Cristiandad por ocurrencias cambiantes con la excusa de lo cívico; la superación de curso con suspensos, el
aprobado curricular, las becas muy por debajo de la excelencia … y tantos disparates más, citando solo el negociado de la Sra. Celaá (que por cierto no me consta que se haya pronunciado sobre los excesos de su vicepresidente).

Y mucho me temo que eso que yo llamo capitalismo de última generación -los ricachones, para entendernos- en buena medida caracterizado por la avaricia, el que gobierna el mundo y tiene por aliados o lacayos, esbirros en algún caso, a los dirigentes políticos, no sólo fomenta la ignorancia sino que invierte en ella. Teorías de la conspiración aparte. Y notables excepciones con nombre y apellidos propios.

El que gobierna el mundo y tiene por aliados o lacayos a los dirigentes políticos, no sólo fomenta la ignorancia sino que invierte en ella.

No importa que la Agenda 2030, con su mediático y seductor logo circular y multicolor, contenedora de objetivos nobles en su enunciado primario, y consciente seguidora de Davos como evidencian la mayoría de sus citas, resulte guía y referencia para gobiernos de todo el mundo. Importa que sea efectiva en la erradicación de la ignorancia y de la pobreza, cuando por el contrario parece justificar, al menos por omisión en el primer caso, actitud tan ladina como su fomento.

Desde la ignorancia de la historia y de la ciencia, desde la inexperiencia y la ausencia de la práctica del esfuerzo, desde la carencia de responsabilidad anterior, desde la mediocridad manifiesta, naturalmente se está apostando aquí, en España y desde el mismo Gobierno, por la ignorancia ajena. Con la complicidad de quiénes en ello tienen un buen negocio.