El parque “a medio hacer” en Campanar que ha costado 671.000 euros

Los vecinos de Campanar tenían muchas ganas de estrenar parque en la calle Reina Violante, junto al colegio San José de Jesuitas. La inversión de 671.000 euros prometida por el Ayuntamiento auguraba un buen parque para transformar lo que era hasta un gran descampado de tierra. Pero la ilusión de los vecinos se ha tornado en decepción cuando han visto que el parque “está a medio hacer”. 

La tierra no ha desaparecido, faltan instalaciones y el parque más bien “es una gran chapuza, antes era un descampado y ahora es un descampado con canastas y rampas”, comenta uno de los vecinos. “Faltan papeleras (no hay ni una), faltan bancos para sentarse (hay poquísimos cuando cabrían muchos más), falta iluminación (no hay ni un solo foco ni farola)… hay zonas que deberían estar valladas, debería haber césped o similar en las zonas de tierra... ¿Alguien sabe dónde dirigir una queja formal?” subraya otro molesto vecino. 

El parque de la calle Reina Violante es una vieja reivindicación del barrio, que por ejemplo ha presentado varias veces a los presupuestos participativos Decidim VLC obteniendo muchos votos y apoyo vecinal. El proyecto contempla elementos de deporte al aire libre como una pista pumptrack (circuito para las bicicletas BMX) o una zona de pilota. Pero a la hora de la ejecución da la sensación que han dejado el parque por acabar. 

“Sinceramente lo que han hecho es una chapuza. No tiene nada que ver el origen con el final. Una cancha de baloncesto en medio de la del fútbol cuando hay espacio de sobra para haber hecho dos independientes. Sin una fuente ni nada, por acabar. Según tengo entendido no van a plantar nada, sino que dejarán que crezca lo autóctono, que no será otra cosa que malas hierbas… Una pena de dineral gastado, con mejor planificación, gusto y mismo dinero, hubiera podido quedar mejor. Mejor que un descampado es, pero si haces algo hazlo bien, ¿no?” es el resumen que hace una vecina ante el nuevo parque.

“Si es que hasta han dejado el terraplen de tierra conforme estaba. Se ve que la idea que tienen de acondicionar es que vuelva a llenarse de malas hierbas como antes”, subraya un vecino. Que el parque se haya dejado de tierra poniendo sólo la pista de pumptrack y las canastas, sin un ápice de hierba o césped, es una de las críticas principales a lo que se suma la falta de servicios como fuentes, puntos de luz o papeleras. Y eso que ha costado 671.000 euros. Esperemos que el Ayuntamiento no tenga que gastar otros 671.000 euros para poder dejar el parque ‘completo’.