Admitida la demanda por la contratación irregular de 300 interinos en Valencia

La demanda interpuesta por siete funcionarios al Ayuntamiento, en la que pedían la nulidad de las bolsas de trabajo del Ayuntamiento y por la que se pueden quedar sin trabajo más de 300 interinos, ha sido admitida a trámite por el Juzgado de lo Contencioso nº 10 de Valencia, que ha citado a las partes en el juzgado el 18 de febrero de 2022.

La estimación de esta demanda podría desencadenar la acreditación de hechos probados que serían constitutivos de un presunto delito de prevaricación administrativa cometido por el vicealcalde de Valencia, Sergi Campillo, y por la concejal de Personal, Luisa Notario, ambos de Compromís, por la contratación, en fraude de Ley, de esos 300 interinos para el Consistorio.

Ambos concejales aparecen en representación de la Corporación como firmantes de las actas de la mesa de negociación con los sindicatos que, según la demanda, se salta las bases legales para la convocatoria de las bolsas de trabajo.

Los empleados públicos que denunciaron piden la nulidad de los acuerdos de convocatoria de las bolsas de interinos que no hayan superado la segunda prueba y, en particular, las bolsas y nombramientos creadas y efectuados, respectivamente, por los Acuerdos de la Junta de Gobierno Local (en el caso de que existan dichos acuerdos) basados en los acuerdos de la Mesa General de Negociación de 9 y 29 de mayo de 2018.

Esto supondría que más de 300 interinos perderían su trabajo y podría haberse cometido una presunta prevaricación administrativa por los concejales Sergi Campillo y Luisa Notario, entonces responsable de Personal del Ayuntamiento y su asesora en materia de personal. 

El portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Valencia, Pepe Gosálbez, ya exigió hace unas semanas al alcalde de Valencia, Joan Ribó, el cese “fulminante” de Campillo y Notario si llegaban a ser imputados, de acuerdo a la promesa de inicio de mandato del alcalde en caso de que alguno de sus concejales fuera investigado. “Esto les sitúa un paso más cerca de la calle, que es donde deberían estar desde hace tiempo. No podemos consentir que el Ayuntamiento siga siendo el cortijo de Compromís, con la colocación a dedo de personal afín al partido pancatalanista, y la supresión de derechos de los funcionarios de carrera”.