El despido multitudinario en sanidad que desnuda la incoherencia del Consell

"Rescatar personas", "las concesiones sanitarias son las que despiden", "no podemos relajar las medidas de prevención porque el virus está ahí"... frases que en los últimos años hemos escuchado hasta la sociedad en boca de los principales dirigentes del autodenominado Consell del Botànic. Y en particular de su vicepresidenta y portavoz, Mónica Oltra.

No obstante, a pesar de la reiteración en los mensajes, 3.251 profesionales de la sanidad contratados por la Generalitat dejarán de trabajar el próximo 1 de junio por decisión del ejecutivo autonómico. Son personas cuya misión consiste en combatir el virus y ayudar a prevenir o a sofocar su contagio y que cobran dinero público, no de empresa privada alguna.

Es el propio Consell quien los cesa o quien los despide, porque una de las acepciones más claras de este último término en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Valenciana explica que la acción de despedir consiste en "alejar, deponer a alguien de su cargo, prescindir de sus servicios".

Esto hace la Generalitat en un despido multitudinario, masivo, de personal laboral. Lo lleva a cabo en plena pandemia, con la campaña de vacunación que necesita un empujón para acelerarse y con unas listas de espera desmesuradas no ya tanto para operaciones, sino incluso para visitas de especialistas y en algunos centros de salud para recibir la simple inspección -aunque sea telefónica- del correspondiente médico de familia.

Y, mientras, la vicepresidenta responde en una entrevista en TVE negando su conocimiento de esta circunstancia y limitándose a transmitir su "empatía" hacia los despedidos y a afirmar que "así será" cuando le preguntan por los ceses. Todo ello a la par que la comunicación a los afectados por la no renovación se produce de las formas menos ortodoxas -verbal, por whatsapp, sms...- y sin informar a las juntas de personal de personas afectadas y con qué criterios. 

La reacción de Oltra ante el despido de 3.251 sanitarios: "eso parece" y "hay que ser más empático"

Los principales sindicatos han convocado concentraciones en los diferentes departamentos de salud miércoles, jueves y viernes. Conselleria no quiere dar su brazo a torcer mientras la Comunidad Valenciana sigue con toque de queda vigente porque el Consell dice que no hay que bajar la guardia ni relajarse. Aunque él sí que lo haga despidiendo a 3.251 profesionales sanitarios.