La fiscal progresista que deja a Oltra sin la “teoría de la conspiración ultra”

“Es una persecución de la ultraderecha y de una de las fundadoras de Vox”, con esta frase la vicepresidenta de la Generalitat y líder de Compromís, Mónica Oltra, se justificaba y se victimizaba ante la investigación por encubrimiento y desacreditar a la menor que sufrió abusos sexuales por parte de su marido y que podría acabar con ella misma imputada. Incluso Oltra metía en su “teoría de la conspiración” al ex presidente Francisco Camps o al director ejecutivo para Europa de Centene (Ribera Salud), Alberto de Rosa.

Pero el informe de la Fiscal Superior de la Comunitat Valenciana, Teresa Gisbert, además de poner a Oltra en una difícil situación, destroza también su “teoría de la conspiración de la ultraderecha” que la vicepresidenta volvió a esgrimir ayer mismo en su rueda de prensa, esa misma en la que atacaba a la propia Fiscal.

Teresa Gisbert (Valencia, 1957) pertenece a la Unión Progresista de Fiscales y ella misma se define como “feminista y reivindicativa” como defendió en su toma de posesión como fiscal superior, siendo por cierto la primera mujer que accedía a este cargo.

De una reputada familia jurídica, tiene una trayectoria como fiscal especializada en menores, por lo que su informe sobre el ‘caso Oltra’ adquiere más relevancia porque Teresa Gisbert sabe de lo que habla. Gisbert es una firme defensora de una lucha frontal contra la violencia de género y la violencia sexual contra las mujeres y la trata, nada que ver con Vox o la ultraderecha. Un perfil progresista y feminista -y especialista en menores- que destroza por completo la teoría de Oltra y Compromís de que la “persecución” contra ella viene de la derecha.

Mónica Oltra ataca a la Fiscalía y le acusa de “elucubraciones” y “conjeturas”

Crece la preocupación para Puig y Díaz

Y mientras Oltra arremete contra la Fiscalía, crece la preocupación para Ximo Puig. El presidente de la Generalitat no puede permitirse que su acción de gobierno, que debe defender la portavoz del Consell que es la propia Oltra, quede todo el rato eclipsada por las novedades en torno al caso de abusos sexuales. La Comunitat Valenciana se ha convertido en el foco de la noticia por el ‘caso Oltra’, y eso no sólo le afecta a ella personalmente, sino a la imagen del Gobierno valenciano y del propio Puig si no es capaz de reaccionar cuando llegue la imputación a menos de un año de elecciones.

Quién también tiene motivos para preocuparse es la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, que hizo de Oltra uno de sus principales apoyos para realizar alianzas con otras fuerzas políticas y lanzar su plataforma de unión de la izquierda. Oltra puede pasar de ser un buen aliado a un activo tóxico y un problema en esa plataforma de Díaz.

Ya se lo verbalizaba el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida: "espero con ansiedad saber si Yolanda Díaz, que no quiere incorporar a Carmena, quiere incorporar a Mónica Oltra, de que la Fiscalía dice que urdió un plan, una conjura, para tapar los abusos sexuales a una menor, y llegó a desacreditar a la menor". Ahí queda el mensaje.