El presidente del Grupo Ribera demanda a Compromís

Compromís ha encontrado una herramienta nueva para denostar la sanidad en su terco objetivo de expropiar y revertir cuanto más servicios sea posible.  Y no les importa que sea mentira, ni que verter acusaciones tenga consecuencias legales. La coalición nacionalista, señalando al PP por sus vínculos, vuelve a acusar al presidente del Grupo Ribera, Alberto de Rosa, de "hacer un uso privilegiado" del Hospital del Vinalopó después de desvelar que fue atendido por un infarto. De Rosa ya ha presentado una demanda contra Compromís a la que ha tenido acceso ESdiario que denuncia un presunto "atentado contra el honor y la dignidad" y por la "difusión de información privada médica para un fin político".

Inmediatamente después de que el diputado Carles Esteve asegurase que, para atender al infarto de Alberto de Rosa, el hospital supuestamente "se saltó la lista de espera, se cerró una hemiplanta entera y puso seguridad privada"; este hospital gestionado por el Grupo Ribera emitió un comunicado en el que desmintió "rotundamente" las acusaciones. 

El portavoz de Compromís, Joan Baldoví, toma el denunciado por Carles Esteve una semana después con el objetivo de elevarlo de nivel y cuestionar al propio presidente de la Generalitat en la sesión de control de Les Corts. El líder de la coalición nacionalista preguntará sí "mantendrá la salud de los ciudadanos del departamento de salud Elche-Crevillente en manos de una persona que hizo un uso privilegiado de las instalaciones del hospital del Vinalopó". Así, los nacionalistas dan por hecho que se dio ese supuesto trato preferente que difunden, de nuevo, en Les Corts. 

Se da la circunstancia de que estos hechos ya han sido denunciados por el propio gerente del Hospital del Vinalopó. El presidente del Grupo Ribera, Alberto de Rosa, ya ha abierto un frente judicial contra Compromís al haber presentado una demanda ante el juzgado.

En la demanda, se denuncia un "constante y feroz ataque" por parte de Compromís ya desde que formaba parte del gobierno del Botànic y "no sólo al modelo de prestación de servicios sanitarios, sino también a las mercantiles a través de las que se materializa".  Un ataque a la sanidad privada que acabó por convertirse en "persecución y hostigamiento", según el denunciante. 

La demanda se basa en tres posibles hechos constitutivos de infracciones que, incluso, podría ser constitutivas de delito. Por un lado, revelar que sufrió un infarto. La demanda recuerda que esos datos expuestos "son absolutamente reservados, forman parte de la salud y la intimidad" de Alberto de Rosa. 

Por otro lado, porque asevera que esos hechos "son absolutamente falsos" y "jamás tuvieron lugar". Y por último, por el daño al honor que supone verter esas injurias comparándole incluso con el mafioso de la película 'El Padrino' como hizo Carles Esteve. Pero la demanda no sólo señala a este diputado y al portavoz de Compromís. También a otros diputados e incluso miembros de la coalición de gobierno. 

También el propio Hospital ha desmentido a Compromís. El gerente, Rafael Carrasco, asevera que "es rotundamente falso que haya habido algún trato de favor". De hecho, asegura que ni siquiera existen esas citadas hemiplantas: "son todas iguales". 

Asimismo, el jefe de la unidad arritmia del hospital, Luis González, relata en un vídeo cómo ha tratado al paciente en igualdad de condiciones que al resto, con la urgencia que requería el caso ante un posible "riesgo de muerte súbita".