Los artistas falleros piden a Díaz que 'afloje' con las inspecciones de trabajo

El Ministerio de Trabajo se ha puesto duro con las fallas y amenaza al tradicional proceso de la 'plantà', el momento en el que los monumentos salen a la calle y son montados en la ubicación, convirtiendo Valencia, y las localidades que esta semana celebran la tradicional fiesta valenciana, en auténticos museos urbanos llenos de arte, cultura y sátira. Al parecer, varios funcionarios han aparecido, durante la jornada de hoy, en la 'plantà' de varios monumentos de la Sección Especial y Primera A para revisar toda la documentación de las personas que en ese momento se encontraban implicadas en el proceso.

El Gremio Artesano de Artistas Falleros de Valencia pide a la Inspección de Trabajo que "acomode y flexibilice sus demandas de manera razonable" en las inspecciones realizadas durante la 'plantà' de los monumentos falleros de 2024. Los artistas falleros ya fueron avisados, durante unas primeras revisiones en los talleres, de que se realizarían estas inspecciones, que responden a un plan rector de prevención laboral.

Por su parte, el gremio ha señalado que durante estas inspecciones hay artistas que han transmitido "preocupaciones" por haber recibido "presión" en el momento de la 'plantà', que debe finalizar este viernes. Hay que tener en cuenta que estos procesos tienen unos tiempos muy limitados y, en muchas ocasiones, varios artistas han de llevar a cabo varios. La presencia de los inspectores supones una 'pérdida de tiempo' que puede ser crucial, además de que muchos de los materiales utilizados, grúas, camiones..., son alquilados por horas e incrementan el coste.

Tras subrayar que los artistas falleros "quieren y tratan de cumplir con sus obligaciones y las de sus trabajadores", la organización recuerda que "también buscan mantener la tradición de plantar con la colaboración y participación de los miembros de la comisión fallera, personas que no forman parte del personal profesional del taller de Fallas".

"Es importante tener en cuenta las circunstancias especiales en las que se realiza el trabajo en la 'plantà' de falla, en la calle y dependiendo de la forma, dimensión y ubicación de la falla", argumenta.

Por tanto, el gremio defiende que es necesario "resolver la cuestión y ver una manera de armonizar la normativa y la práctica tradicional de plantar fallas, a fin de preservar el hecho de que es Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, precisamente para cuidar esa forma típica de realizar el trabajo colaborativo".