| 27 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse

5 pueblos muy cerca de Madrid para ir y venir en el día

Están lo suficientemente lejos como para convertirse en una aventura y lo suficientemente cerca para ir y volver en el día

| E.V. Viajar

 Tanto si vives en Madrid y tienes ganas de hacer una escapada como si estás de visita y ya te has saturado de asfalto, estos cinco municipios que puedes visitar en el día son una opción estupenda para pasar una jornada en familia.

 

-  Pedraza (126,2 km por A-1)

Si no lo conoces, este enclave te va a encantar. Situado en lo alto de un cerro, se accede  por una carretera muy empinada que sigue el trazado del antiguo camino por el que los comerciantes llegaban al pueblo. Tras pasar por una de las puertas de acceso, te verás obligado a dejar el coche en un amplio párquin y seguir el recorrido a pie; y es que Pedraza es uno de los pocos lugares de este país que ha sabido ver en la conservación de sus edificios,  plazas, iglesias y palacios una fuente de riqueza turística. Un paseo por sus calles empedradas es viajar en el tiempo y la oportunidad de admirar un pueblo que es un ejemplo de rehabilitación y estética.

-Imprescindibles: - Visita al castillo de Zuloaga, donde hay una pequeña pero interesante colección del pintor; visita a la antigua cárcel, a poder ser guiada. Su historia es impresionante; comprar dulces, pan y/o embutidos, y comer el mejor cordero que hayas probado nunca en cualquiera de los restaurantes de su encantadora plaza que ha servido de decorado en numerosas películas y anuncios.

 

- Chinchón (48,1 km por A-3 y M-311)

A 45 minutos de la capital y dentro de la Comunidad de Madrid, Chinchón es otro ejemplo de cómo se puede mantener todo el sabor de un pueblo conservando gran parte de su arquitectura original. Sus calles están llenas de casas solariegas, algunas sin rehabilitar y otras, que aunque sí lo han sido, mantienen el porte de sus mejores años.

- Imprescindibles: Tomar un aperitivo en el Parador de Turismo enclavado en un antiguo convento agustino; comer en su plaza balconada cualquiera de los productos de la tierra; comprar "pelotas de fraile" y "tetas de novicia" ( dos dulces típicos de la localidad) en el Obrador Sandra, y visitar la iglesia de la Asunción, en cuyo retablo principal podrás admirar el cuadro "Asunción de la Virgen" de Francisco de Goya

 

- Medinaceli (155,5 km por A-2)

Calles empedradas, antiguos conventos, casonas recuperadas, zonas amplias para que jueguen los niños, un auténtico arco romano y varios restaurantes en los que se come estupendamente hacen de Medinaceli un lugar ideal para ir a pasar el día . 

-Imprescindibles: Comprar dulces hechos por las monjas clarisas del Convento de Santa Isabel , junto a la iglesia de San Martín. Son una delicia; visitar la Colegiata donde se puede ver una hermosa talla del Santísimo Cristo de Medinaceli del siglo XVI en madera policromada, y pasear por sus calles y su Plaza principal. 

 

-Piedrahita (175,7 km por N-110)

Piedrahita huele a leña en invierno y  su plaza porticada todavía alberga algunos antiguos comercios que parecen haberse estancado en los años 50. Los tejados de su iglesia están cubiertos por decenas de nidos de cigueñas, y con el buen tiempo no hay nada más agradable que sentarse al solecito en la terraza de La Cabaña y pedir algunas de sus tapas.

- Imprescindibles: Dar un paseo por el parque que rodea el antiguo palacio de los Duques de Alba; comer en la Posada Doña Cayetana; merendar en el Café del Comercio y comprar morcillas de calabaza en cualquiera de las carnicerías del pueblo.   

 

 

- Pastrana (85,3 km por R-3)

Como es natural, en esta localidad todo gira en torno a la figura de la Princesa de Éboli, no en vano, Ana de la Cerda estuvo encerrada en el palacio Ducal de esa localidad los últimos doce años de su vida por orden de Felipe II. En la fachada del imponente palacio, se puede ver el balcón enrejado que da a la plaza de la Hora, llamada así porque era desde ese balcón donde se permitía a la princesa asomarse una hora al día. Si te das una vuelta por sus calles, algo que es muy recomendable, podrás encontrar la antigua sede de la Inquisición, la fuente de los Cuatro Caños y numerosos edificios perfectamente conservados a lo largo del tiempo. 

-Imprescindibles: Visitar la iglesia que está en la Plaza del Ayuntamiento y que cuenta con una de las mayores colecciones de reliquias de España; comer en cualquiera de sus muchos restaurantes y comprar miel de la Alcarria.