| 26 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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La nuera de la duquesa estalla y revela el trágico drama que arruinó su vida

Sin duda, a su ex marido no le hará ninguna gracia que vuelva a ser noticia por esta cuestión dado que salpica directamente a la que fuera su famosa familia política. El pasado vuelve.

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La duquesa de Alba respiró aliviada cuando su heredero, Carlos, le confesó que se había enamorado. La elegida era una joven sevillana, de buena familia y sin mancha alguna en su currículum. Hablamos de Matilde Solís, décima hija de los marqueses de la Motilla, muy cercanos al Opus Dei. Para entonces, Mati ya había empezado a ir al psiquiatra. Tenía veintidós años cuando pisó por primera vez la consulta de Javier Criado.

Tres años más tarde, se uniría en matrimonio con Carlos Fitz-James Stuart, una ceremonia que se celebró con la pompa y el boato correspondiente. Al regreso de su luna de miel, la pareja se instaló en el palacio de Liria. De ahí se mudarían a una casa en la urbanización Montepríncipe.

Ya habían nacido sus dos hijos, Fernando y Carlos, cuando Matilde Solís dio síntomas de que algo no iba bien en su vida. Estaba triste, cabizbaja y rehuía los compromisos sociales. Se encerraba cada vez más en su mundo. Para entonces, su matrimonio con quien en aquellos días ostentaba el título de duque de Huéscar ya naufragaba.

Sin embargo, ninguna de las partes había hablado de separación. El 25 de marzo de 1999, Mati decidió acabar con su vida disparándose con un arma de fuego en el pecho. Estuvo muy grave pero logró recuperarse. Permaneció ingresada varias semanas hasta que recibió el alta. La versión oficial habló de accidente doméstico. Sin embargo, para entonces, ya se había filtrado lo que realmente ocurrió aquella fatídica madrugada. Posteriormente, llegaría la separación de la pareja.

Tuvieron que pasar dieciséis años hasta que quien fuera nuera de la duquesa de Alba se atreviera a contar lo que motivó el intento de suicidio. Lo hizo a través de una carta que publicó en redes sociales y en la que daba el nombre completo de la persona que provocó su tragedia. Según ella, nada más y nada menos que su psiquiatra, Javier Criado: “Llegué a su consulta con 22 o 23 años. Metida en una fuerte depresión, vulnerable, maleable. Con los límites de lo moral borrosos y otros problemas añadidos que él ignoró. Me aferré a Javier Criado como a un clavo ardiendo. Aquella relación indefinible se prolongó en el tiempo.

Me casé y se convirtió en una especie de amistad. Javier Criado abusó de una persona enferma, desesperada, a lo largo de los años. No prestando ayuda, ignorando problemas, manipulando como solo lo puede hacer un buen conocedor de los resortes de la mente, que es lo que no podemos negarle. Javier Criado Fernández me llamó por teléfono pocos días antes de mi intento de suicidio. Hizo mención a tres temas en concreto que desencadenaron en mi cabeza absoluta desesperación”. La publicación de la carta provocó una gran conmoción social y Matilde Solís la borró.

Decidió entonces que no volvería a tocar el tema y que seguiría adelante con la causa contra el psiquiatra. Se reunió con otras pacientes del psiquiatra y algunas reconocieron haber pasado por lo mismo que ella. Un total de ocho mujeres que han denunciado al médico, que fue llamado a declarar el pasado 31 de octubre. Pues bien, el pasado domingo, Matilde volvió a utilizar las redes sociales para aclarar la naturaleza de las vejaciones que ella asegura la sometió el facultativo: “Sufrí abusos sexuales”. Sin duda, a su ex marido no le hará ninguna gracia que vuelva a ser noticia por esta cuestión dado que salpica a la Casa de Alba.