Desvelado el secreto de la "foto prohibida" de Encarna Sánchez e Isabel Pantoja

El Viva la Vida de Emma García en Telecinco sigue explotando el filón, abierto hace una semana, de la "foto prohibida" de Encarna Sánchez con Isabel Pantoja, en una playa, censurada durante 23 años hasta que su autor, el paparazzi Diego Arrabal, la dio a conocer en las pantallas de Mediaset.

¿Por qué se escondió aquella foto? El incesante rumor sobre una supuesta relación afectiva entre ambas estrellas ofreció siempre una primera explicación, sin otro soporte que la intuición: jamás ninguna dio pábulo a esa posibilidad, que dejó de citarse cuando la mítica locutora falleció y el respeto sustituyó al cuchicheo.

La polémica foto secreta de Encarna y Pantoja que ve la luz 23 años después

Pero ahora hay nuevos datos, y el propio Arrabal los ha ido desgranando. La verdad, la versión actual es bastante menos oscura que la ofrecida el pasado fin de semana, respaldad por un audio en el que se escuchaba a Encarna bramar contra la difusión de esa imagen, con un lenguaje amenazante que, sea por eso o no, lo cierto es le hizo a todos guardar el documento en un cajón y no mostrarlo a la opinión pública.

Otras tomas que ahora ven la luz en "Viva la vida"

Ahora sí lo ha hecho su autor, pero dando una explicación más sencilla: Encarna ya estaba enferma -murió apenas un año después de que fueran tomadas- y no quería que la vieran con peluca, ese recurso para tapar la calvicie derivada del duro tratamiento que siempre es la quimioterapia.

¿Fin de la historia?

Así que nada de idilios, simplemente dos amigas juntas, con una de ellas protegiendo su intimidad en unos momentos ya muy duros por el terrible avance de la enfermedad que acabó finalmente con su vida. 

"En esas imágenes Encarna Sánchez lleva peluca", se ha limitado a decir Arrabal, que tras alimentar el morbo, lo ha enfriado de repente: la periodista producía un videoclip de la tonadillera, por eso estaba allí, en esa playa bien poco romántica rodeada de un amplio equipo técnico para realizar el trabajo. ¿Fin de la historia? Quién sabe.