Iceta auxilia a la Generalitat y justifica que no vacune a los policías

Miquel Iceta ha salido al rescate de la Generalitat tras el escándalo denunciado por policías y guardias civiles que ha puesto de manifiesto como Cataluña los ha dejado atrás en la estrategia de vacunación, priorizando a los  Mossos d'Esquadra e incluso a los presos por delante de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado dependientes del Ministerio del Interior.

Finalmente ha tenido que ser el Ministerio de Sanidad el que asuma esa tarea, sin que los gobernates catalanes se inmutasen, e incluso, tal y como relató ESdiario, considerasen que "políticamente" les viene bien la polémica, dado que el independentismo lleva años aislando socialmente a ambos cuerpos.

Cataluña ordenó vacunar a 6.000 presos antes que a policías y guardias civiles

 Pero ahora el ministro de Política Territorial y Función Pública ha defendido a los independentistas y ha justificado la intervención de Sanidad porque "nos dijeron que habían tenido unos problemas técnicos entre otras cosas por el cambio de criterios de vacunación y de utilización de las vacunas (...) Entonces el Gobierno les dijo: oye si tienes ese problema, no te preocupes, yo me hago cargo y vacuno yo", ha explicado.

Esta respuesta ha llegado en la reunión de la Comisión de Función Pública del Senado a preguntas de la senadora de Ciudadanos, María Ponce, que ha calificado esta postura de la Generalitat como "una nueva humillación a un colectivo que no se le merece".

Pero Iceta ha optado por defender al gobierno catalán y abroncar a la representante naranja: "Me ha parecido ver que usted está más interesada en ver si reñimos a la Generalitat que si vacunamos a los policías, y nosotros hemos decidido vacunar a los policías", ha dicho. 

Sin embargo, pese a los intentos de Iceta de maquillar la polémica disfrazándola de un "problema técnico", los datos facilitados por la Confederación Española de Policía (CEP) y la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) indican que el proceso de vacunación ha permitido que en el conjunto de España se haya vacunado con la primera dosis el 76% de los efectivos de la Policía Nacional y el 78% de la Guardia Civil, una cifra que "se desploma" en Cataluña: poco más del 14% ha recibido una dosis en la Policía y un 15% en el caso de la Guardia Civil.