Valencia CF: Los adoradores de ricos

En tiempos muy remotos la prensa era el cuarto poder, aquel que vigilaba desde fuera el cumplimiento de los  derechos fundamentales y libertades; la prensa era el portavoz y al mismo tiempo garante del pueblo... Aunque el cuento, bello e idílico, realmente duró poco y en contados casos se mantiene, la realidad es que la libertad y autonomía de los medios comienza y acaba donde empieza la de las empresas del Ibex 35, los bancos, los gobiernos... los que mantienen vivo a los medios con sus publicidades o subvenciones y, en el caso que nos preocupa, las sociedades anónimas deportivas. Los que mantienen a las empresas periodísticas luego se cobran la dádiva y ponen al medio a su servicio.  

Los amos del actual Valencia, más conocido por Singapur CF de Valencia -hago un Juan Roig, añado el "de Valencia" y todos contentos- están bloqueados ante la actual situación y su forma de reaccionar es culpar a la prensa de que sea haga resonancia del grito de auxilio de una afición que se siente estafada, engañada y humillada por quienes dirigen el club, pero sobre todo por los que les vendieron "la cabra" de Lim, encabezados por los presidentes del Valencia y de la Fundación, Amadeo Salvo y Aurelio Martínez, que en una asamblea fake -ni el Podemos más pujante de Iglesias y Monedero manipuló tanto, y mira que estos saben de decisiones asamblearias torticeras...- consiguieron, pasado el tiempo se puede comprobar, que todo lo que prometieron no se haya cumplido -¿mentir? ¿engañar?... lo importante sería saber por qué lo hicieron y a cambio de qué, si es que hubo un de qué...-.

Pero todo ello se logró con la inestimable ayuda por una legión de prensa deportiva entregada al nuevo rico, creyente de Salvo sin medida a cambio de dos risas la mayoría, aunque algunos fueron más listos y han sido SUPERvivientes del sistema, con mensajes a la Tribuna y a su querida afición, a la antigua marabunta...

Y otros se mantuvieron críticos por encima de todo, incluso pese a los intereses de sus jefes y medios, y ejercieron su libertad, en algún caso costándoles algún disgusto... y no me refiero a Pedro Morata que sólo se mueve por el interés personal, y si atacó  a Anil, una mano que le daba de comer, fue porque le dolió en su bolsillo. El tiempo le coloca en su lugar -aunque ande yo caliente...- y siempre está al servicio de quien hace feliz sus negocios particulares, siendo desleal a su empresa y pasando por la vida sin amigos -cenar y comer sólo, en chándal y con el Aston Martin en el paso de cebra para que se vea, aunque sean ostras y mariscos, al margen de ser hortera, es triste-.

Hubo periodistas independientes como, por ejemplo mis amigos el calvo y el zorro, Manolo Montalt y Salva Folgado - enhorabuena por vuestro fichaje por Plaza, os uní en Radio Nou y ese matrimonio funciona y mejora con el tiempo-; Paco Polit - el que mejor ha reflejado el centenario que Singapur ha despreciado-; Héctor Esteban  - qué gran periodista tiene LP, escribe directo y al pie, el periodismo es contar lo que está ahí,  en nuestras narices, pero poco los ven y menos lo saben contar, así me lo enseñó el maestro Ferran Belda..

Héctor, como mi hermano Fernado Miñana o Peio Bort, lo sabe hacer-; Fran Guaita - enhorabuena,  jefe de deportes de la SER en Valencia,  hace 17 años en Radio Nou supe que contigo y con Damià Vidagany la Taula iba a ser el referente, un periodista de raza, y eso que en muchas cosas no coincidimos, pero el periodismo sin trabajo y pasión no es vivo-; Nacho Cotino -hace falta su sillas gol-, mi José Luis García Canet, al que con 22 años le puse a batallar y aprender a trabajar en un medio vetado, y no es fácil, pero pese a eso ha sido capaz de dar primicias como el adiós de Lay Hoon y hacerse duro e intuitivo... otros han navegado sin buscarse problemas, es correcto y muy respetable,  ni en contra ni a favor, que luego Madrid te pide un protagonista y estar vetado es problemas. Lo entiendo.

Y os lo puede decir quien desde la 99.9 Valencia Radio lleva seis años sin protagonistas ni noticias ni entradas ni regalos ni contratos de alquiler... ni nada de nada... del Valencia, por veto, hasta me desinvitaron hace años a la comida de Navidad a la que no iba a ir pero me repudiaron antes de que me excusara.

Fuimos vetados primero por Damiá Vidagany -tan trabajador y buen comunicador como pelota a la vez que desleal a sus jefes, pregunten-, ahora metido en el mundo de los representantes y pontificando, cuando debería estar callado tras servir a Soriano; hacer la pelota a Soler por si volvía; aguantar con Llorente -que le bajó el sueldo que triplicaba al de un presidente del Gobierno y al tiempo comprobó cómo le traicionaba y hablaba a diario con un Salvo preparando su asalto al Valencia... el bueno era Jordi Bruxiola, ahí está llevando de tercera Segunda A al Castellón, sensacional gestor y mejor persona-; estuvo de mayordomo de Salvo, al que nunca supo mantener a raya, y acabó con Lim... no le fue suficiente ir a trabajar con rodilleras y hacer reverencias hasta cuando entraba en un chino a comprar bombillas, ni cargarse todo el sensacional trabajo que habían hecho Bruixola y Llorente con La Curva, al ponerles la cruz porque estos se negaron a poner una pancarta a favor de la entonces presidenta Lay Hoon, porque estaba triste . 

Ahora el encargado es Álex Navarro, y los vetos crecen, pero es injusto que se juzgue y ataque a una persona por temas personales, así se lo he hecho saber al propio Álex y me solidarizo con él -no pierdas fuerzas leyendo tuits y likes en tu contra y céntrate en el VCF-, él puede ser del equipo que quiera, lo importante es que sirva al Valencia y lo haga bien - por cierto delante de Mateo Alemany, Pepe Barberá y mío dijo que él no era del Levante y Mateo le dijo, "si no pasa nada, yo soy del Mallorca"... en todo caso será del Barcelona como Lim y Anil-; un director de comunicación debe trabajar por su club, no por él, en el Levante UD hay un director de marketing y comunicación y marketing, Alberto Gil, toda la vida del Valencia CF y hace un trabajo extraordinario, y ya es de la resistencia.También es injusto criticar a Álex por sus ideas políticas, ni sé ni me importa si es de Compromís o catalanista o de la Unió de Llauradors, lo importante,  repito, es hacer su faena,  y hoy en día es imposible ante tanto frente abierto y con el miedo a que Kim Koh abra tu puerta y te despida.

Resulta curioso ver cómo los mismos que jaleaban y promocionaban al amo son los que ahora lo critican,  salvo quien es leal con lo que dijo y sigue pensando que Lim los puso, los va a poner y hasta va a acabar el estadio. Otros, lo que hicieron portadas y programas de radio diciendo, entre otras cosas, "Lim te queremos", deberían taparse un poco. No hay problema ni miedo a nombrarlos, pero a lo mejor les damos un protagonismo que ya no tienen porque casi nadie cree ya sus patrañas, y el único valor del comunicador es la credibilidad. Salvo os engañó, pero vosotros sabréis por qué y qué poco os costaría decirlo...

A mí Salvo me engañó, también por culpa del ego de demostrar que se podía colocar a un presidente en el Valencia, pero solo hasta que llegó a la presidencia y comprobé que era un mitómano de libro. Habéis pasado de adorar al rico a ser los primeros en matarlo, menos uno que al menos es coherente. El que vive de las redes, muere en la redes.

Hoy en día cada valencianista con una cuenta de Twitter,  Instagram, Facebook es un comunicador y opinador, duro e implacable, a veces es verdad que twitter se convierte en una tertulia de bar de coléricos borrachos,  pero para eso está la opción del bloqueo y cerrar la aplicación. Pero la mayoría opina con educación, te guste más o menos, y estos no viven de la publicidad de una empresa o gobierno al que servir ni llevan mochilas de favores a sus espaldas.

Les mueve sólo el amor a un escudo, el del Valencia CF.