El PP de Castilla-La Mancha se suma a la petición de prórroga a la central nuclear de Almaraz
Paco Núñez, presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, se sumó al reclamo para retrasar el cierre de la central nuclear

El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez
Tras una reunión con el presidente de la Federación de Municipios y Provincias de Castilla-La Mancha (FEMP) y alcalde de Talavera de la Reina, José Julián Gregorio, este viernes, el presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, se ha unido a la petición de una prórroga de la actividad de la Central de Almaraz.
La decisión la ha notificado el propio Partido Popular en una nota de prensa, argumentando que el cierre de la central nuclear situada en Cáceres implicaría acabar con decenas de empleos en Talavera de la Reina y su Comarca.
Núñez ha defendido la producción de energía nuclear y ha afirmado que el poder ejecutivo, liderado por Pedro Sánchez, va "en dirección contraria" a los países occidentales y toma decisiones "sin sentido común", apuntando a la inclusión de la energía nuclear en la lista de energías verdes de la Unión Europea.
Además de transmitir su apoyo al PP de Extremadura y a la presidenta autonómica María Guardiola en el reclamo por mantener la central, el presidente regional del partido anunció que los 'populares' presentarán una Proposición de Ley con el objetivo de retrasar el cierre de las centrales nucleares en España.
"Todos los que apostamos por la nuclear como una energía de presente y futuro, tenemos un mismo interés", declaró Núñez, que además tiene en cuenta que es esencial "defender también que Castilla-La Mancha tiene una central operativa en Trillo".

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El de Núñez no es el primer aviso del peligro que implica la decisión del Gobierno de prescindir de la energía nuclear. Hace algunas semanas, Marc Altés, presidente de Econucleares, alertaba en ESdiario sobre ello: "la única razón por la que se está realizando este cierre es por motivos políticos".
Altés decía que "la mayor parte de los países del mundo no solo están planteándose parar el cierre de sus centrales, sino empezar a construir nuevas centrales. España es uno de los pocos países y creo que el único de la Unión Europea que sigue con un plan de cierre nuclear".
Asimismo, alertaba sobre las consecuencias del cierre de centrales: "hay un problema muy grande entre lo que el Gobierno nos está vendiendo, que es que todo será un futuro de renovables y la realidad, que es que técnica y económicamente es imposible depender de energías renovables". El activista ecológico predice que eventualmente se necesitaría "una fuente de energía alterna que supla sus faltas, y si no es la energía nuclear, será pues gas natural".