Carnaval
Pilar Rahola reta al carnaval de Terrasa a mofarse de un imán y no de un obispo: “Reíros del Islam”
La famosa tertuliana ha criticado el cartel que promociona la festividad y qye pone a un obispo en tacones porque eso "no es valiente porque todo el mundo puede reírse de la Iglesia Católica, la libertad es hacerlo con la islámica"

Cartel promocional del carnaval de Terrasa
Se ha desatado la polémica en redes sociales y en los medios de comunicación, después de darse a conocer el nuevo cartel promocional de los carnavales de Terrassa. En él, se puede ver a un obispo mostrando su retaguardia, con las rodillas y las manos apoyadas en el suelo y con unos zapatos de tacón de color rojo, mientras observa a los asistentes celebrando la festividad. Este cartel ha sentado mal a personalidades catalanas, como la exconcejala del Ayuntamiento de Barcelona y famosa tertuliana, Pilar Rahola, que ha mostrado su molestia a través de su cuenta de 'X', y a entidades religiosas, que están recolectando firmas para retirar el cartel.
La siempre crítica con el mundo islámico ha querido mostrar su desacuerdo con el cartel a través de un post en sus redes sociales personales, ironizando con la situación: "¡Mira, qué valentía para un cartel: un imán con tacones rojos! ¡Oh, cállate! No es un imán, es un obispo...", comentó Pilar Rahola, menospreciando el cartel y añadiendo que lo realmente valiente hubiese sido hacerlo en relación con la religión islámica, no con la cristiana.
Su publicación se llenó de comentarios de usuarios que apoyan a la expolítica, aunque hubo algunos más críticos a los que Pilar Rahola contestó contundente: "No soporto la enorme hipocresía. Hoy, todo el mundo puede reírse de la Iglesia Católica, afortunadamente. La gran lucha por la libertad de expresión es poder hacer lo mismo con la islámica. ¡Provocar con un imán! Imagínate qué valentía...", añadió.
No es la primera vez que el cartel del carnaval de Terrassa despierta polémica y se convierte en el foco de las críticas. En el año 2018, el cartel titulado "155 sombras", mostraba el cuerpo de una mujer sin ropa con tres manos encima jugando a piedra, papel o tijera. Esto hizo explotar a organizaciones feministas pidiendo incluso su retirada.