TELEVISIÓN ESPAÑOLA
TVE estalla: rebelión interna de los trabajadores contra Javier Ruiz y Jesús Cintora por la manipulación sanchista
El Consejo de Informativos abre una investigación contra 'Mañaneros 360' y 'Malas Lenguas' tras una ola de quejas internas y les señala como "vulneración sistemática de la pluralidad"

Jesús Cintora y Javier Ruiz
TVE vuelve a ubicarse bajo el foco de las críticas. Lo que algunos desde la dirección venden como un éxito de audiencia, otros desde dentro lo denuncian como una traición a los principios más básicos del periodismo público. El Consejo de Informativos ha abierto una investigación “de oficio” contra los programas 'Mañaneros 360', presentado por Javier Ruiz, y 'Malas Lenguas', con Jesús Cintora al frente, por una presunta vulneración sistemática de la pluralidad, el rigor y la independencia.
Según el Consejo de Informativos, la decisión se toma por iniciativa propia, pero también tras recibir “numerosas quejas” por parte de los profesionales de los informativos de la casa. La preocupación ha aumentado, ya que los contenidos de ambos programas, producidos externamente, se alejan peligrosamente de los criterios que exige la Ley de RTVE, el Mandato Marco, el Estatuto de la Información y el Manual de Estilo.
Es cierto que la llegada de Javier Ruiz y Jesús Cintora ha levantado las cifras de audiencia en La 1 y La 2, pero muchos dentro de RTVE advierten que no se puede sacrificar la credibilidad por aumentar los números de audiencia, especialmente en una televisión pública. Varios redactores han comunicado por escrito que no desean participar en los espacios, denunciando su sesgo informativo y su falta de neutralidad. No es la primera vez que Cintora se encuentra en una tesitura similar a esta, en el año 2021 su programa 'Las Cosas Claras' fue cancelado de forma abrupta por un motivo similar.
Ambos presentadores Javier Ruiz y Jesús Cintora están siendo criticados por la audiencia general de Televisión Española. Los usuarios de redes sociales continuamente comentan partes de sus programas en las que tanto los colaboradores, como los contenidos, van en la dirección ideológica del sanchismo, dejando de lado la objetividad, de una manera descarada y burda.