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Milei arrasa en Argentina y deja en ridículo a la TVE sanchista que auguraba su fracaso
Mientras la televisión pública española alertaba del “desastre” que supondría una victoria del ultraderechismo, el libertario triunfó con más del 40 % de los votos y convierte sus críticas en papel mojado frente a los hechos
Javier Milei se ha impuesto en las elecciones legislativas de Argentina
Javier Milei ha logrado una victoria rotunda en las elecciones legislativas de Argentina, superando el 40 % de los sufragios y consolidando su mayoría en el Congreso y Senado. Los resultados confirman el amplio respaldo popular al presidente libertario, que revalida así su proyecto económico y político frente a una oposición fragmentada y debilitada.
El éxito de Milei contrasta con las predicciones catastrofistas difundidas por RTVE en los días previos a los comicios. La cadena pública española alertaba de un supuesto “desastre” si el líder libertario lograba mantener su apoyo, calificaba su gestión de “cruel” y vaticinaba un desplome electoral por el descontento social. Ninguno de esos pronósticos se ha cumplido.
El descalabro mediático de RTVE ha sido tan visible como simbólico. La televisión pública, alineada con el discurso del Gobierno de Sánchez y su narrativa del miedo a la “ultraderecha”, vuelve a quedar en evidencia al subordinar el análisis periodístico a la propaganda ideológica. La realidad, una vez más, ha desmentido a sus tertulias y titulares alarmistas.
Milei, que se ha presentado ante sus votantes como un reformador decidido a recortar el gasto público y liberalizar la economía, ha convertido el desdén mediático en combustible político. Su victoria, inesperada para los analistas de RTVE, consolida su figura y le otorga un margen de maniobra para impulsar las reformas que prometió.
Mientras tanto, RTVE y buena parte del entorno mediático afín al sanchismo deberán asumir su error. El libertario, al que daban por políticamente acabado, ha arrasado en las urnas y ha dejado en evidencia el sesgo informativo de una corporación que, lejos de informar, parece más interesada en moldear la opinión pública.