derecho a la protesta
Dichosos patinetes
¿A qué se debe la impunidad que parece exhiben en sus formas atropelladas de circular, nunca mejor dicho?

Agentes de la Policía Local de Benidorm realizan controles en patinetes eléctricos
Llevaba ya un tiempo con ganas de escribir acerca de los dichosos patinetes eléctricos, que tanto peligro tienen. La semana pasada falleció un menor de 13 años a causa de un accidente mortal en El Saucejo (Sevilla), al chocar con un coche el patinete en que viajaba junto a otro chaval. Ese otro chico sufrió heridas, pero está fuera de peligro. Es un hecho lamentable que jamás debería haber ocurrido, porque, ¿qué hace un menor de esa edad conduciendo un vehículo a motor, cuando está prohibido? Por desgracia no es un suceso aislado, dado que en 2024 se registraron 396 accidentes en este tipo de vehículos en España, que dejaron 240 lesionados, 102 de ellos de carácter grave, y 14 personas fallecidas. Imagino que más de un lesionado acabaría con secuelas importantes de carácter permanente.
Las principales causas de los accidentes el pasado año fueron la colisión con otros vehículos (65%), seguida de las caídas (22%) y el atropello a peatones (10%). Estas son las principales conclusiones del Análisis de la Siniestralidad de Vehículos de Movilidad Personal 2024, realizado por Fundación Mapfre y el Centro de Experimentación y Seguridad Vial Mapfre (CESVIMAP), a partir de siniestros publicados en los medios de comunicación, que fue difundido a principios de 2025. Las cifras reflejan un aumento del 23% en siniestros respecto a 2023 y habrá que ver las de este año, que estoy convencida de que estarán yendo en aumento. El informe de Fundación Mapfre se basa en noticias publicadas en prensa, entre las que destacaría una que es para nota: “Se accidenta con el patinete que había robado en Lleida y da positivo en drogas”. Un crack. Solo te faltó dejar preñada a la de la ambulancia.
Me ha sorprendido -aunque tiene su lógica- que muchos de los accidentados que conducían estos vehículos fueran personas de más de 50 años, pues obviamente los reflejos y la agilidad son más propios de la juventud.
Los patinetes son un medio de transporte imprescindible para muchas personas, que hacen uso a diario de ellos en sus desplazamientos. Muy respetable. Sin perjuicio de ello, los conductores de los patinetes son en muchas ocasiones un verdadero peligro, tanto para ellos como para otros conductores, viandantes y vehículos en general. Suelen campar a sus anchas por donde les place, sin que nada ni nadie parezca ponerles freno. Circulan por las aceras cuando quieren o ven dificultades en el tráfico, muchos no llevan casco, y son los reyes del mambo de la velocidad. Y me pregunto, ¿a qué se debe la impunidad que parece exhiben en sus formas atropelladas de circular, nunca mejor dicho? ¿Por qué no se les exige, al menos, el examen teórico de conducir, para que sepan lo que significan las señales, se les informa de sus obligaciones como conductores de vehículos a motor y se les exige que cumplan con las normas, como cualquier otro conductor? ¿A qué obedece este trato preferente, que conlleva un peligro para todos?
Recuerdo que hace unos días me pasó rozando un patinete que venía despendolado, cuando estaba parada en un semáforo con mi moto. Ya las motos tienen bastante peligro, pero lo de estos vehículos es el remate. Teóricamente tienen prohibido circular por aceras, zonas peatonales, autopistas, autovías, vías interurbanas y túneles urbanos, pero en realidad los vehículos de movilidad personal (VMP) circulan como uno más por donde les da la gana. Desde este año legalmente se exige el uso de casco y se prohíbe que lo conduzcan los menores de 16 años, pero ya ven el caso omiso que hacen muchos.
La velocidad de estos vehículos es otro de los temas más importantes, porque, según la DGT, estos vehículos deberían circular como máximo a 25 km./h, pero todos sabemos que esta velocidad máxima no la respetan en absoluto, no sé si algunos patinetes estarán trucados o qué, pero les aseguro que he visto patinetes corriendo a más de 50 km/hora por vía urbana y, como tampoco les exigían certificado de circulación hasta el 22 de enero de 2024, ancha es Castilla. Los vehículos más antiguos tienen hasta 2027 para obtenerlo, nada, sin prisa. También hemos visto más de una vez dos personas subidas a un patinete, a toda velocidad, y no pararse ni en semáforos ni en pasos de peatones. Ni en barras. Y es que muchos parecen tener una crisis de identidad y no tener claro si son vehículo o peatón. ¡A ver si viene el Tío de la Vara a poner a la gente firme, por favor!