"Puedes ir a la cárcel": las amenazas del consistorio socialista de Vila-real a una concejal de Compromís por destapar sus tejemanejes

Turbulencias en el Ayuntamiento de Vila-real después de que la concejala de Compromís, responsable del área de Cultura, Dora Saura, haya tirado de la manta destapando que en su departamento había un funcionario que, pese a su reiterado absentismo laboral, seguía en su puesto y que la concejala socialista, Noelia Samblás, no hizo nada. Esto provocó que Saura interpusiera una denuncia por la que el técnico, y otra persona no determinada, han sido imputados. Sin embargo, la cosa va más allá, puesto que, además, fruto de dar a conocer este hecho, la edil nacionalista ha afirmado haber recibido "presiones y amenazas personales" por parte de "responsables máximos" del consistorio: “me han dicho que iban a hacer pública información personal mía que me podría llevar a prisión y quitarme mis bienes”.

Toda la polémica estalla cuando el viernes pasado, la concejala de Cultura, en una entrevista para la radio local Ràdio Vila-real, hace pública esta denuncia contra un técnico que figuraba que trabaja en su departamento, pero que no acudía a su puesto de trabajo, sin justificar su ausencia. Por este motivo, el departamento de Recursos Humanos, según Saura, habría abierto un expediente a este funcionario, pese a que el alcalde socialista, José Benlloch, lo niega. La de Compromís también afirma que su antecesora en el cargo, la socialista Noelia Samblás, podría haber hecho caso omiso de esta situación, pues fue Saura quien puso el caso en manos de la justicia para evitar que esta consecuencia le pudiera salpicar.

Sin embargo, más allá de la cuestión del absentismo, Saura, en una nueva entrevista en Ràdio Vila-real que ha tenido lugar hoy mismo, no solo no se arrepiente de dar a conocer este caso, sino que además afirma que, como consecuencia de ello, habría recibido amenazas personales, presiones e injerencias en su trabajo por parte de "responsables máximos del consistorio". También denuncia que alguien está intentando acallar a los medios de comunicación para que no cuenten ciertas cosas: “hay ayuntamientos que se rigen por el imperio romano, que acababan a cuchillazos, y eso no reporta ningún beneficio a la ciudadanía ni lleva a ningún lado”, afirma la concejala.

La de Compromís, a pesar de que no dirige el tiro directamente a sus socios de gobierno del PSPV, apunta a “máximos responsables municipales” y a “lobbies” o un “grupo de presión” relacionado con el ámbito cultural que también la estaría coaccionando, sin ningún tipo de empatía hacia su persona.

El pasado 19 de julio de 2024, Compromís y PSPV firmaban un acuerdo de gobierno para dar estabilidad al consistorio, un acuerdo que fue calificado como “histórico” por parte del alcalde socialista, José Benlloch, pero que puede acabar siendo desastroso fruto de las desavenencias entre ambas formaciones, que vienen siendo una constante desde aquel día.

A raíz de ese pacto, conocido como el de Llum de Tol, entraron a formar parte del gobierno municipal Maria Fajardo, como primera teniente de alcalde y concejala de Servicios Públicos —incluyendo Medio Ambiente, Cementerio y Agricultura—, además de asumir la Concejalía de Igualdad; Santi Cortells, concejal de Normalización Lingüística, Archivo Municipal, Transparencia y Diálogo Intercultural; y Dora Saura, que, al llegar al puesto que ocupaba la socialista Noelia Samblás, se encontró con este ‘percal’ que ha destapado las prácticas ‘mafiosas’ de algunos miembros del ayuntamiento.