Se desata la guerra por la RFEF: Tres candidatos y un pasado turbulento
La Operación Soule y Villar, el piquito de Rubiales, la inhabilitación de Rocha, el juego político... La Federación Española de Fútbol se la disputan Louzán, Merchán y Gomar en un ambiente muy crispado

Cartel de entrada en la sede de la RFEF, en Las Rozas
La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) se encuentra en medio de una tormenta política y judicial que ha sacudido sus cimientos desde la era de Ángel María Villar, pasando por Luis Rubiales y Pedro Rocha. La institución, marcada por escándalos y polémicas, se prepara para elegir a su nuevo presidente el próximo 16 de diciembre.
Los tres candidatos a la presidencia son Rafael Louzán, Sergio Merchán y Salvador Gomar. Louzán, presidente de la Federación Gallega de Fútbol y ex presidente del PP en Pontevedra, se enfrenta una condena de inhabilitación por prevaricación actualmente recurrida al Supremo, lo que ha generado dudas sobre su idoneidad para el cargo y cuenta con la oposición frontal del PSOE y de su antiguo partido. A pesar de ello, cuenta con el respaldo de la mayoría de los presidentes territoriales, que son los que dirigen el voto.
Sergio Merchán, presidente de la Federación Extremeña, es visto como el 'delfín' de Pedro Rocha. Merchán ha sido señalado por su cercanía con el último presidente, quien también fue inhabilitado. Esta relación ha levantado sospechas sobre la continuidad de prácticas cuestionables dentro de la RFEF.
Salvador Gomar, presidente de la Federación Valenciana, se presenta como el candidato del cambio y por tanto el que goza de menos apoyos en el mundo del fútbol, aunque el Grupo PRISA se ha posicionado rápidamente de su lado. Gomar ha prometido una renovación profunda en la RFEF, alejándose de las controversias que han marcado a sus predecesores. Sin embargo, su capacidad para unir a los diferentes sectores del fútbol español está por verse.
La elección de un nuevo presidente no será tarea fácil. La RFEF ha estado bajo el escrutinio público desde la Operación Soule que salpicó a Ángel María Villar, que forzó su marcha, y el escándalo del beso no consentido de Rubiales a Jenni Hermoso, lo que llevó a su dimisión. La inhabilitación de Rocha solo ha añadido más leña al fuego de un estamento que, visto desde fuera, parece cualquier cosa menos limpio.
Presiones de Tebas y la FIFA
Los problemas legales, las presiones de Javier Tebas (presidente de LaLiga) y las luchas internas han dejado a la RFEF en una situación precaria. La elección del 16 de diciembre será crucial para determinar el futuro de la Federación y su capacidad para superar las controversias que la han plagado durante años. Y mientras, la FIFA mira de reojo avisando que si existe alguna injerencia política en el proceso, inhabilitará a España de participar en competiciones de selecciones y podría dejarla sin Mundial 2030.