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Lucas Vázquez celebra su gol al Alavés
Lucas Vázquez celebra su gol al Alavés

El Tamudazo de 2023 provoca el cambio de líder en Primera

Dos goles en el tramo final de sendos partidos, como sucediera en la Liga del Clavo Ardiendo, hacen que el año se cierre con un nuevo líder en la clasificación de Primera División

| Mariola Lopez Deportes

Dos goles en dos estadios diferentes, en el tramo final de sendos partidos, que ponen patas arriba la clasificación. Eso pasó con el Tamudazo de 2007, y eso ha pasado este jueves 21 de diciembre de 2023. El año se cerrará (ya no hay más fútbol liguero hasta 2024) con un nuevo líder de Primera. Y todo por esos dos tantos postreros que voltearon todo.

Primero, el recuerdo. El Tamudazo. Los dos goles que cambiaron el devenir de una Liga, la de 2007, la del Clavo Ardiendo. Real Madrid y Barcelona peleaban denodadamente por el campeonato. Los azulgrana llevaban una ventaja arrolladora pero los blancos, entrenados por Capello, lograban victoria tras victoria en finales agónicos. Y así se llegó a la penúltima jornada liguera.

El Real Madrid visitaba Zaragoza y el Barcelona recibía al Espanyol. Los dos equipos marchaban empatados a puntos pero el goal-average le daba el título a los blancos en caso de igualdad final. En La Romareda el equipo entrenado por Capello fue perdiendo por 1-0 y 2-1. En el Camp Nou, por su parte, el Barcelona ganaba al Espanyol también por 2-1 en un partido en el que Messi imitó a Maradona, qué cosas, con un gol con la mano.

Y en 17 segundos cambió la historia. Los partidos se celebraban a la misma hora, así que los transistores echaban humo. Cuando todo parecía acabado, el soberbio delantero holandés Ruud van Nistelrooy marcó en La Romareda y puso el 2-2, un resultado que no le valía aún al Madrid, que estaba en ese momento dos puntos por debajo en la clasificación. Fue entonces cuando ocurrió lo inesperado.  17 segundos después del gol de Van Nistelrooy, Raúl Tamudo empató el encuentro del Camp Nou. Aquella Liga acabó siendo blanca.

Sevilla y Vitoria

El nuevo fútbol ha acabado con esas emociones de los partidos simultáneos. Pero el jueves pasó algo similar, a horas diferentes. El líder, el Girona, visitaba al Betis. Y el Real Madrid, segundo, rendía cuentas en Vitoria ante el Alavés. Los de Míchel volvían a demostrar su solidez y se adelantaban en Heliópolis (0-1) mientras el Madrid, en un partido mediocre, no atinaban a crear peligro y encima se quedaban en inferioridad por expulsión de Nacho.

Y se llegó al tramo final de ambos partidos. El Girona a nada de acabar el año como líder, los de Ancelotti sumidos en un mar de dudas. Y de repente, con los catalanes desperdiciando un mar de contras para sentenciar, Pezzella aprovechó un par de rebotes para hacer el 1-1. Era el minuto 88 y no quedaba tiempo para casi nada más. El Girona perdía dos puntos. Y en Mendizorroza, con el Madrid sin alma, en la última jugada del partido, minuto 92, un córner botado por Kroos era cabeceado a lo Santillana... por Lucas Vázquez. El lateral derecho. Victoria blanca 0-1. Los de Ancelotti igualan al Girona en la tabla pero son líderes por mejor diferencia de goles. ¿Será un Tamudazo o el Girona aguantará el envite?