La canallada de Puigdemont para aprovecharse de la muerte de Johan Cruyff

Johan Cruyff murió este jueves a los 68 años. El mito del fútbol, muy querido entre el barcelonismo, falleció rodeado de su familia, que envió el siguiente comunicado a la prensa:

"El día 24 de marzo 2016 Johan Cruyff (68) ha fallecido en Barcelona, rodeado de su familia después de una dura lucha contra el cáncer. Os pedimos con gran tristeza que se respete la privacidad de la familia durante su tiempo de duelo".

Mientras el mundo del fútbol lloraba su pérdida, desde Diego Maradona a Messi pasando por Stoichkov, Ronaldinho, Pogba, los hermanos De Boer, Iniesta, Luis Suárez y Gerrard -entre otros muchos-, el presidente de la Generalitat aprovechaba su muerte para hacer política. Y patria.

Carles Puigdemont escribió un artículo en la página web del diario Sport que dice mucho -o muy poco- de él y de lo que es capaz por la causa independentista. "La aportación de Cruyff, sin embargo, va mucho más allá del fútbol, porque su personalidad se ha convertido en un referente de país, por encima de las diferencias de colores o de afinidades deportivas. Cambiando al Barça también contribuyó a cambiar la manera de ser de los catalanes. Su gran virtud fue abrirnos los ojos y demostrarnos que podemos ganar, no solo deportivamente, sino como país", sostiene en él Puigdemont.

Y añade, con el cadáver de Cruyff aún sin enterrar siquiera: "Los valores de su carrera deportiva y personal son ampliamente compartidos por una sociedad catalana que hoy tiene fijados horizontes ambiciosos.

El mensaje de su hijo 

Cinco días antes de su fallecimiento, con motivo del Día del Padre, su hijo Jordi colgó una foto de ambos en Twitter dándole las gracias por enseñarle "los valores de la vida". Entonces casi nadie sabía que su estado era crítico.

In Spain it's father's day! Thanks for being who you are & teaching me life's values, my role model @JohanCruyff pic.twitter.com/urREFdpG2r

— Jordi Cruyff (@JordiCruyff) March 19, 2016

Cruyff, presidente de honor del Barça y Balón de Oro tres veces, padecía un cáncer de pulmón que le fue detectado en octubre y que no ha podido superar.

No obstante combatió la enfermedad con entereza. El mes pasado declaraba al diario deportivo Sport: "Tengo la sensación de ir ganando 2-0 en la primera parte de un partido que aún no ha terminado, pero que esto seguro de que acabaré ganando".

Y añadía: "Después de varias sesiones de tratamiento médico, hoy puedo decir que los resultados están siendo muy positivos gracias al excelente trabajo de los doctores, al cariño de la gente y a mi positiva mentalidad".

Las condolencias se suceden desde que se conoció la noticia. Y los culés ya están pidiendo en las redes sociales que el Camp Nou pase a llamarse Johan Cruyff.