| 29 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Concentración a las puertas del Ayuntamiento de Azuqueca, donde residía Arantxa.
Concentración a las puertas del Ayuntamiento de Azuqueca, donde residía Arantxa.

El trauma de los dos hijos mayores de Arantxa, que pidieron socorro a una vecina

Azuqueca está conmocionada por el asesinato de una joven de 37 años a manos de su pareja en el domicilio familiar. Según una vecina él era violento, aunque nunca hubo denuncia alguna.

| ESdiario España

Tienen 12 y 9 años y jamás olvidarán este 28 de diciembre en que asesinaron a su madre. Arantxa, una joven de 37 años que residía en Azuqueca de Henares (Guadalajara) desde hace 14 años, se ha convertido en la víctima número 48 de la violencia machista en lo que va de año, la tercera desde Nochebuena. 

Sus dos hijos mayores (fruto de un matrimonio anterior) fueron los que, pasadas las 7 de la mañana, subieron a casa de una vecina a alertar de que la pareja de su madre, con quien tenía un bebé de apenas 14 meses, la había apuñalado. 

La vecina llamó al 112, pero Arantxa ya estaba muerta y su asesino, herido en el cuello y tórax porque había intentado suicidarse. Está en el hospital.

Cuentan los vecinos que empezaron a escuchar una fuerte discusión minutos antes, pero no había denuncia previa por maltrato ni eran habituales las voces en casa.

No obstante una vecina, Rocío, ha narrado que el hombre "era una persona violenta que en una riña por una cuestión de los niños ya cogió del cuello a un vecino". Y que Arantxa era "buena persona". 

Ambas tenían "bastante trato" -según Rocío- y siempre que podían se ayudaban, al tiempo que ha relatado que su hijo y el de la fallecida son amigos.

A las puertas del Ayuntamiento de Azuqueca se celebró este jueves al mediodía una concentración para condenar el asesinato. Se han decretado tres días de luto oficial y las banderas del balcón ondean ya a media asta.

En este 2018, 27 niños han quedado huérfanos tras los asesinatos de sus madres.