| 02 de Mayo de 2024 Director Benjamín López

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Sánchez, con el niño que salió a besarle y darle unos dibujos
Sánchez, con el niño que salió a besarle y darle unos dibujos

La polémica frase utilizada por Sánchez para estrenar una campaña a cuchillo

El líder del PSOE se estrena con un discurso guerracivilista de la España de los dos bandos y suelta un controvertido mensaje para asustar a los ciudadanos y estimular a sus votantes.

| Javier Rodríguez España

Aunque Franco ha desaparecido de la campaña, por la imposibilidad de desenterrarlo antes del 28A, Sánchez sigue haciendo de la España de los dos bandos el eje de su campaña electoral, hasta el punto de estrenarse en Dos Hermanas con una controvertida frase que, en su sentido literal, resulta espeluznante: "Tenemos que teñir de rojo España".

Aunque sea el color de la sangre, el líder del PSOE la dijo por el color corporativo de su partido y, de paso, por mantener el tono guerracivilista de la España de los dos bandos, enterrado en la Transición y resucitado ahora por un dirigente que, cuando murió Franco, no tenía ni cuatro añitos.

Pero es su manera de asustar a la ciudadanía, colocando en el mismo saco a "las tres derechas" e incluyéndolas luego, a continuación, en ese relato según el cual todas ellas nacen de una estirpe franquista que actualizan ahora, en pleno siglo XXI, para retrotraer España a una especie de neofranquismo sin Franco, al que no obstante se resucita por el curioso método de enterrarlo de nuevo.

Sánchez advierte del peligro de una España de nuevo en dos bandos que, en realidad, solo él intenta resucitar

"No pasarán", otro lema de la época que completa al de Sánchez y aparece a menudo en los discursos más incendiarios de Iglesias, Garzón o Monedero; para completar un paisaje en el que Sánchez quiere parecer Manuel Azaña pero a duras penas pasa de Largo Caballero, autor de aquella célebre frase en un mitin en febrero del 36: "“Si los socialistas son derrotados en las urnas, irán a la violencia, pues antes que el fascismo preferimos la anarquía y el caos".

Sánchez se limita a querer "teñir de rojo España", mientras a su lado, en su debut,  Susana Díaz hace méritos en vano para no ser sustituida a medio plazo por la ministra María José Montero con otro mensaje en tono apocalíptico: "O Pedro o todo lo demás (...), la derecha más cruel,egoísta, xenófoba".

Que no falte un niño

Éste va a ser el tono general del PSOE hasta el último domingo de abril: apelar al peligro de la derecha mientras se ayuda a una de ellas, la de VOX, invitándola a debates. Que una cosa es que España esté a punto de volver al franquismo y otra que no venga bien alimentarlo para ganar desde el miedo todo lo que se pueda. 

Solo faltaba un niño en el escenario para rematar la estampa y Pedro Sánchez lo tuvo: el pequeño salió al escenario, fue besado por el candidato socialista y le entregó un dibujo de sus rivales. Por si acaso alguien no se había quedado ya con su cara.