Duelo en tablas el 23J: las razones de la "amarga victoria" de Feijóo

Alberto Nuñez Feijóo, consciente de que esto deja algo tocado su liderazgo, va a seguir su hoja de ruta: pedir que se deje gobernar a quién ha ganado las elecciones y en concreto dirigirse especialmente a Vox en lo que ya se empieza a acuñar como un 'si patriótico' de los de Abascal para no estar en el Gobierno y que así el PNV pueda dar a Feijóo los 5 que le faltan. Una fórmula que no se antoja fácil

En Génova reconocen que, a posteriori, todo se ve con más claridad pero si hay una causa que marca la diferencia entre el éxito del 28M y el resultado de hoy esa ha sido sin lugar a dudas los pactos con Vox.

Mientras que Pedro Sánchez dió la orden de dilatar hasta después del 23J la investidura de María Chivite en Navarra - para la que es imprescindible la abstención de Bildu - las distintas Comunidades Autónomas donde había ganado el PP se lanzaron a pactar con Vox y cuando Feijóo tomó el timón y enderezó el rumbo, visto lo visto esta noche, ya era un poco tarde. Y esto explica las principales causas de que Frankenstein haya resucitado.

El PSC barre en Cataluña

Los socialistas de Salvador Illa se disparan hasta los 19 diputados y convierten a Cataluña en uno de sus grandes graneros de voto en una noche además que ERC ha sufrido un gran varapalo y que Carles Puigdemont desde Junts se convierte en clave para que pueda reeditar el Pacto de esta legislatura Pedro Sánchez.

Los socialistas aguantan en Andalucía

La Andalucía de la mayoría absoluta de Juan Manuel Moreno Bonilla ha aupado al PP al primer puesto con 26 escaños pero el Partido Socialista ha aguantado frente a todo pronóstico y ha conseguido 21 diputados ganando incluso en Sevilla.

Fuga de votos de Cs

Los antiguos votantes de Ciudadanos se habían pasado en bloque al Partido Popular pero para que s un porcentaje significativo no le ha gustado los pactos con el partido de Santiago Abascal y han abandonado a los populares para votar a Pedro Sánchez.

Trasvase de votos PSOE-PP

Era otra de las grandes bazas de Feijóo para intentar llegar a la Moncloa, llegó a ser hasta del 10% pero a la vista de los sucedido, parece que sacar a pasear el espamtajo de que viene la derecha le habría funcionado a los fontaneros de la Moncloa.

En definitiva, que se ha guardado el champagne para mejor ocasión y habrá que estar muy atentos en los próximos días a Alberto Núñez Feijóo y a la auto exigencia que se impuso en el Congreso de Sevilla salió elegido presidente del PP de que estaba en política para ganar.