El Gobierno replica indignado al TC que el confinamiento salvó 450.000 vidas

Los cimientos sobre los que edificó Pedro Sánchez el primer estado de alarma y el confinamiento que trajo aparejado se han venido abajo tras la resolución del Tribunal Constitucional declarándolo inconstitucional. 

El enfado del Gobierno con el máximo intérprete de la Carta Magna es mayúsculo. En especial con la vicepresidenta del TC, Encarnación Roca, que ha terminado por decantar la balanza en favor de la inconstitucionalidad de aquella medida excepcional por seis votos a cinco. Los socialistas la consideran una de los suyos porque es del llamado bloque progresista. De ahí que su indignación sea mayor.

A la ministra de Justicia le ha tocado salir este miércoles por la tarde a explicitar la postura del Ejecutivo en una comparecencia sin preguntas y leída en un teleprónter que se ha retrasado más de una hora sobre el horario previsto. "El Gobierno la respeta pero no la comparte", ha empezado afirmando en su debut. 

Pilar Llop ha defendido que el estado de alarma fue declarado "conforme a los parámetros constitucionales" y ha destacado que de hecho cinco de los once magistrados así lo han considerado. Utilizando así en su favor la división en el seno del Pleno del Constitucional. 

La titular de Justicia ha señalado que el confinamiento salvó en España "450.000 vidas" (una cifra que el presidente dio antaño), tergiversando así el pronunciamiento del TC. Porque el tribunal no cuestiona en ningún momento el confinamiento, sino el instrumento que el Gobierno utilizó para imponerlo: el estado de alarma en vez del estado de excepción. 

Según la ministra fue la democracia española la que utilizó el estado de alarma, no el Gobierno

Es más. Llop ha atribuido la decisión de utilizar el estado de alarma no a Sánchez, tampoco a su Gobierno, sino directamente a la "democracia española". 

Según ella, España no fue la excepción sino la norma, utilizando las herramientas que tenía a su alcance para "defender la vida de millones de compatriotas", como hicieron otros países europeos.

El presidente continúa haciendo amigos en el poder judicial. El enfrentamiento del Gobierno con el Tribunal Constitucional se une al que ya tiene con el Tribunal Supremo después de indultar a los cabecillas del procés con el criterio en contra del tribunal sentenciador. 

Para la oposición lo ocurrido este miércoles demuestra la "improvisación jurídica" que ha caracterizado a Sánchez durante la pandemia, en palabras del portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal. 

Pablo Casado, por su parte, ha pedido al presidente que apruebe de una vez una Ley de Pandemias para hacer frente a la quinta ola. "Aguantamos las críticas de muchos por decir que retirábamos nuestro apoyo al estado de alarma, e incluso aguantamos las críticas de muchos por decir que apoyábamos el estado de alarma, aunque habíamos dicho que sabíamos que desbordaba el marco constitucional, pero que no podíamos aguantar mil muertos diarios", se ha justificado el líder de la oposición.