Tezanos y Oliver en la cuerda floja ante la otra revolución que llega a Moncloa

El tsunami político provocado este sábado por Pedro Sánchez con su revolución del sector socialista del Gobierno amenaza réplica. La derivada va a sacudir ahora al núcleo duro de la fontanería del Palacio de la Moncloa, el Ala Oeste de la popular serie a la que tanto recurría el defenestrado Iván Redondo.

La salida de la vicepresidenta, Carmen Calvo, y de su principal enemigo, el citado exgurú del presidente, vaticina una segunda revolución en el gabinete de la Presidencia del Gobierno, en el que Redondo ha campado a sus anchas estos últimos tiempos.

Con la llegada de Félix Bolaños al Ministerio de la Presidencia -la cocina en realidad del Ejecutivo- y de Óscar López como revelo de Redondo, tres son los señalados, según aseguran a ESdiario fuentes socialistas.

El primero, Francisco Salazar, número dos hasta el sábado de Redondo y, como éste, enfrentando a Calvo y a medio PSOE. Pero son otros dos vip los señalados tras los nuevos aterrizajes en el entorno de Sánchez. El presidente del CIS, José Félix Tezanos, y el secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Oliver.

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Según las fuentes consultadas por este periódico, la salida de Oliver es cuestión de horas. "Está ya fuera", aseguran a ESdiario fuentes gubernamentales. De hecho, en estas últimas horas ha comenzado a sonar en las quinielas para su relevo el nombre de Francesc Vallés, excoordinador de los grupos parlamentarios del PSC en el Congreso y Senado.

Cabe recordar, además, que al nuevo jefe de gabinete de Sánchez, Óscar López, le ha acompañado en su último destino en Paradores Sonia Sánchez, exjefa de Nacional de la Cadena SER y una periodista muy bien valorada y respetada entre los informadores que cubren la información de Moncloa.

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Lo de Tezanos se lleva cociendo ya varios meses como adelantó el director de ESdiario, Antonio Martín Beaumont. Y su salida encajaría a la perfección en la estrategia de Sánchez de deshacerse del "ruido" y los "líos" en su círculo más próximo. Primero porque el jefe del CIS ha tenido la virtud de indignar tanto a los socios del PSOE, con Podemos a la cabeza, como a los tres partidos de la oposición.

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Segundo, por el hecho de que Tezanos encaja mal en la apuesta por el rejuvenecimiento del Gobierno y del PSOE que ahora busca Sánchez cara a sintonizar con nuevos caladeros electorales.

El presidente del órgano demoscópico gubernamental es uno de los miembros de la Ejecutiva Federal socialista llamado a abandonar su cargo en el 40 Congreso de octubre. Y es que como ironiza un dirigente del círculo de Sánchez, a Tezanos "no le cabe un escándalo más".