| 16 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Sánchez, este jueves, junto con su homóloga de Lituania en Vilna.
Sánchez, este jueves, junto con su homóloga de Lituania en Vilna.

Sánchez se burla de la cruzada de Garzón contra la carne y Podemos se revuelve

El presidente no ha ocultado su enfado con la última ocurrencia de su ministro de Consumo y ha zanjado la polémica así: "A mí, donde me pongan un chuletón al punto, eso es imbatible".

| J.R.V España

 

 

Si Pedro Sánchez había planteado su nueva doble gira internacional -esta semana en las repúblicas del Báltico y la próxima en Estados Unidos- para relanzar su deteriorada imagen en las encuestas tras la concesión de los indultos, no parece que Moncloa haya logrado sus objetivos.

Al margen del susto del avión ruso en Lituania, al presidente del Gobierno le ha perseguido la actualidad nacional hasta Vilna, con la  quinta ola del covid descontrolada y el ministro Alberto Garzón incendiando al sector ganadero, uno de los pilares de la economía española.

Y basta observar la fulminante reacción del líder del Ejecutivo en su comparecencia ante los periodistas que cubren su gira báltica para comprobar hasta qué punto la última ocurrencia del ministro de Izquierda Unida ha indignado en Moncloa con su ataque al consumo de carne.

Si ya a primera hora el ministro de Agricultura, Luis Planas, había saltado a la palestra para desautorizar a Garzón, después el presidente, simple y llanamente, le ha dado la puntilla. Más aún cuando el titular de Consumo figura en muchas quinielas para abandonar el Consejo de Ministros en la crisis de gabinete que se fragua desde hace semanas.

 

Si el futuro de Garzón en el Gobierno estaba oscuro, desde este jueves está aún mucho más negro.

 

Sánchez ha liquidado la polémica abierta por su ministro de Unidas Podemos con una sola frase, aunque expeditiva, y en menos de un minuto: "Sobre esta polémica, lo diré en términos muy personales: A mí, donde me pongan un chuletón al punto, eso es imbatible", ha zanjado. A buen entendedor...

Sin embargo, la polémica desatada por Garzón amenaza con provocar al presidente más de un quebradero de cabeza.

Podemos se revuelve con apoyo de ERC

En primer lugar, porque algunos de los socios de la coalición Frankenstein, como ERC, han salido en apoyo del ministro; y su portavoz en el Congreso, Gabriel Rufián, ha acusado además al líder del PSOE de "venderle" por la presión de la derecha.

Y en segundo lugar, ya que Podemos ha comenzado una campaña para recordar que la reducción del consumo de carne figura en el plan España 205o diseñado en la misma Moncloa, y que aboga por una reducción del consumo de carne.

"En las próximas décadas, la población española tendrá que reducir la ingesta de alimentos de origen animal", prevé el texto gubernamental que han comenzado a airear la terminales mediáticas afines a Unidas Podemos.

Así que, crecido, Garzón ha optado por desafiar a Sánchez. "A mí me gusta poco hecho", ha ironizado en La Sexta, dentro de su gira por las televisiones manteniendo su apuesta. Y lo que parecía una serpiente de verano, parece amenazar con otra brecha insalvable en la coalición. Y en el peor momento.