El desastre sanitario de Sánchez agranda la brecha con Marruecos y EEUU

La incidencia en España se ha desbocado. Los indicadores publicados este lunes por Sanidad, con datos de viernes a domingo, revelan que la incidencia acumulada a 14 días está ya en los 609 casos por cada 100.000 habitantes y todo apunta a que seguirá subiendo. Unos datos que han servido a Marruecos para avivar la guerra creciente que tiene con España y a la que de forma soterrada se suma Estados Unidos. 

De hecho, desde Marruecos han sido claros y han apuntado al Gobierno como responsable de la situación, acusando incluso de no cumplir los protocolos sanitarios. En concreto, señalan que las autoridades españolas no estarían controlando de forma "adecuada y estricta" ni el estado de salud de los pasajeros ni el pasaporte de vacunación durante el proceso de embarque.

Estados Unidos consuma su ninguneo a Sánchez trasladando efectivos a Italia

Además, según el Ministerio de Salud y Protección Social marroquí, España supone una "amenaza" para la población marroquí debido a la "ausencia del cumplimiento de los protocolos sanitarios contra la COVID-19" y ha confirmado que no va a reanudar los vuelos hacia España.

Marruecos afirma que ha detectado al menos 19 casos positivos de coronavirus procedentes de España a través de vuelos privados, ya sea a su llegada o durante el tránsito. Así, las autoridades españolas competentes "están lejos de asegurar la acción rigurosa de controlar el estado de salud de los pasajeros en los aeropuertos", han asegurado.

Este anuncio se ha hecho tras anunciar que Portugal, en vez de España, servirá como punto de partida para repatriar a los marroquíes varados en Europa en el contexto de las medidas adoptadas para hacer frente a la pandemia, después de que las autoridades marroquíes suspendieran los vuelos directos con destino y salida desde Marruecos el 29 de noviembre.

Estados Unidos recomienda no viajar a España

Y a esta situación se ha sumado uno de sus aliados, Estados Unidos, que ya considera peligroso viajar a España y recomienda a sus ciudadanos no venir a nuestro país ante el repunte del virus, incluyendonos, así, en la lista de países que se encuentran en nivel 4.

"Si debe viajar a España, asegúrese de estar completamente vacunado antes de viajar. Debido a la situación actual en España, incluso los viajeros completamente vacunados pueden correr el riesgo de contraer y propagar variantes de COVID-19", han remarcado las autoridades estadounidenses.

La tensión entre Rabat y Madrid se disparó por la llegada a España del líder del Frente Polisario Brahim Ghali

De esta manera, parece que, Rabat ha tirado de los datos sanitarios para abrir una nueva brecha con España, después del cierre en falso de la tensión existente con nuestro país, y que se inicio con la llegada del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali.

La tensión se disparó con la apertura de la valla y la llegada masiva de marroquíes, ante un Gobierno desbordado por la situación, mientras Estados Unidos se posicionaba junto a Rabat realizando maniobras militares junto al Sahara. 

Con la remodelación del Gobierno, la salida de Arancha González Laya de Exterios y la llegada de  José Manuel Albares, parecía que la tensión se estaba relajando con un intercambio de mensajes positivos que hacían presagiar el fin de los desencuentros. 

Sin embargo, ahora la política sanitaria del Gobierno parece que ha echado por tierra cualquier tipo de entendimiento y el Ejecutivo marroquí no tiene ningún pudor a la hora de señalar a España por no ser capaz de controlar sus fronteras. 

El 'coladero' de Barajas

Aún así, el mensaje no es nuevo, sino que también desde dentro de nuestro país se señalan a los aeropuertos españoles como uno de los puntos negros a la hora de atajar el virus. La Comunidad de Madrid siempre ha considerado que Barajas era un 'coladero' y ha exigido al Ministerio del Interior más medidas.

A finales del mes de noviembre, el consejero de Sanidad, recordó, ante la aparición de ómicron, que desde el pasado mes de mayo el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso lleva alertando de que Barajas es el "principal lugar de entrada" en España para todas las variantes y pidiendo medidas para una "situación de control" en los accesos al país por el aeropuerto madrileño.

A esto hay que unir la falta de efectivos en los principales aeropuertos de España que ha hecho que la situación se desbordase hasta el punto de que en el de Madrid-Barajas más de 6.000 pasajeros han perdido sus vuelos en el último mes a causa de las demoras y largas colas en los controles policiales.