El secreto que Rivera no quiere que se sepa y las hijas góticas de ZP

Después del espectáculo teatral de este jueves a las puertas del TSJC, Artur Mas sigue ocupando buena parte de los análisis políticos este viernes.

Según Cristina Losada en Libertad Digital, "la comparecencia de Artur Mas ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña nos ha servido un cuadro de aire medieval, como de señor feudal que llega retador con su mesnada a plantar cara a quien se atrevió a discutirle que puede hacer lo que le dé la real gana. Sin duda, las varas de mando de los alcaldes, alzadas como lanzas a la salida o a la entrada de la sede judicial, enmarcando la figura del imputado, contribuyeron a dar la impresión de que estábamos ante una escena del Antiguo Régimen recreada con actores a los que no hubo tiempo de vestir en concordancia con la época. Pero el espíritu del acto de apoyo aMas y de repulsa a la justicia sí que concordaba".

Antonio R. Naranjo tira de ironía y caricatura en El Semanal Digital: "400 alcaldes de la heroica resistencia catalana hacen un flash mob para Artur Mas, visto como una especie de Luther King, cuando no un Mandela, por la sufrida parroquia independentista. Junqueras y Romeva también estaban allí, a pie de escaleras de acceso a un Tribunal presentado como un cadalso: el president en funciones no caminaba hacia el lugar donde se aplican las leyes que a él mismo le han dado de comer desde que veraneaba en Asturias y se hacía llamar Arturo; sino a una guillotina jacobina donde mueren los hombres pero nacen los mitos".

Para Antonio Casado en El Confidencial, "lo de ayer fue una dosis de recuerdo sobre el pensamiento tóxico de los nacionalistas cuando conjugan a su modo democracia con legalidad. Un representante de la voluntad popular no puede ponerse fuera de la ley con la excusa de haber sido elegido democráticamente. Así que, o se cambia la ley o se inhabilita a ese representante si el juez aprecia el incumplimiento. No es de recibo el espectáculo de unas personas reclamando la inmunidad judicial de un ciudadano solo porque se comparte con él un determinado ideario político".

Dice Federico Castaño en VozPópuli que "Homs, pata negra del independentismo, pide a Mas ser su hombre fuerte en Madrid. La mayor parte de los dirigentes deConvergencia quieren concurrir a las elecciones generales coaligados con ERC enJuntos por el Sí. Francesc Homs ha propuesto a Artur Mas ser cabeza de lista para "desconectar" a Cataluña de España".

Claro que, según Pablo Planas en Libertad Digital, "la marcha de Mas sobre el TSJC allana el camino para un pacto con la CUP. Baños esperaba al "president" a las puertas del TJSC para mostrarle sus respetos; el líder de CDC le dio unas palmadas en el hombro".

Mientras tanto, todas las miradas comienzan a posarse ya en las generales y, concretamente, en Ciudadanos, que sube como la espuma en las encuestas. Aunque según El Confidencial Digital hay cosas que la formación naranja prefiere que no se sepan: "Los secretos de la reunión de Albert Rivera con empresarios que el líder de C´s no quiere que se sepa. Se celebrará en Barcelona, el 28 de octubre, en un local privado. Asistirán 18 altos ejecutivos y no habrá fotos ni prensa. La irrupción de Riveraen la política nacional ha llevado a los grandes empresarios a intentar acercarse a él para conocer cuáles son sus objetivos y proyectos. Pero se ha exigido la máxima discreción".

Todo lo contrario a la discreción fue el ya famoso "desahogo" de Cristóbal Montoro, al que uno de los aludidos, José Manuel García-Margallo, contesta este viernes con saña desde El Español: "El se ha tomado "a broma" las declaraciones de Montoro a pesar de que detecta una cierta "predilección" por él en su compañero de gabinete. Con sus armas más afiladas- la ironía y el sarcasmo- Margallo le devuelve la pelota cuando uno inquiere por ese supuesto inmovilismo ideológico que le achacó Montoro: "Si eres ágrafo y no lees…Yo he publicado libros todos los años. Decir que yo estoy congelado cuando yo hablé de la unión bancaria antes que nadie, de los eurobonos antes que nadie, de la reforma constitucional antes que nadie, pues bueno".

A todo esto, según El Confidencial Digital, "El Mundo exigió por escrito a Montoroel visto bueno a la entrevista de Jorge Bustos. Se planteó como una "charla entre amigos", se alargó durante dos horas y la dirección del periódico quiso evitar una polémica como la de Felipe González con La Vanguardia. Consciente del revuelo que habían causado sus palabras, el ministro de Hacienda se detuvo ante los medios en los pasillos del Congreso para aclarar que las declaraciones no son una entrevista al uso sino una conversación y una "reflexión de fondo" y "sincera".

Además de esto, en el PP se habla mucho de Soraya Sáenz de Santamaría en las últimas horas. Según Ana I. Martín en El Semanal Digital, "Rajoy no se la juega y encarga a Soraya la parte más sensible de su programa electoral": "La vicepresidenta empezó la legislatura mandando mucho y la termina mandando más. Ella será quien confeccione el programa con ayuda de los ministros y del partido".

Por su parte, Ana Pardo de Vera destaca en Público el "malestar en el PP por la campaña de Soraya para suceder a Rajoy. Los conservadores, sorprendidos por el artículo en el Financial Times señalando a la vicepresidenta como la mejor situada para el relevo del líder del PP a costa de la imagen de éste y el acto-fiesta de balance de legislatura sin el jefe del Ejecutivo".

El PSOE anda liado con el sonado fichaje de Irene Lozano procedente de las filas deUPyD, pero además este viernes OK Diario resucita viejos fantasmas del pasado: "ElPSOE contrató hace cuatro año al empresario Alejandro de Pedro, informático al que el juez Velasco considera uno de los cerebros de la trama Púnica, para llevar a cabo un encargo muy especial: limpiar la reputación digital de las hijas del entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Es decir, el objetivo de ese contrato era contrarrestar la avalancha de burlas que había provocado en Internet el aspecto gótico que Laura y Alba exhibían en la célebre fotografía tomada en septiembre de 2009 en Nueva York, en la que aparecían posando junto a sus padres y el matrimonio Obama".

También siguen resonando los ecos de la recepción real del 12 de octubre. El Buscónde VozPópuli desvela por ejemplo que "la Reina, como Cenicienta: se marchó del Palacio Real con los zapatos en la mano. Letizia terminó la recepción con los zapatos en la mano pero sólo en presencia de su séquito más cercano".