Julián Contreras se fustiga tras su despido de TVE: "Soy un bufón de la tele"

Tras su comentado despido como colaborador de 'Días de verano', el matinal de TVE, Julián Contreras ha roto su silencio. Más que su marcha, lo que de verdad molesta al hijo de Carmina Ordónez es el motivo de la misma: un rótulo en el que se presentaba como relaciones públicas de un casino a las afueras de Madrid.

El asunto provocó un gran revuelo en las redes. Hasta Rubén Sánchez, portavoz de FACUA, interpeló directamente a Alberto Garzón, ministro de Consumo, por este motivo desde su cuenta de Twitter: "Que TVE fiche a Julián Contreras como relaciones públicas de un bingo puede suponer una práctica de publicidad encubierta y su ministerio tiene competencias para actuar al respecto. ¿Va a hacerlo?".

Julián Contreras deja 'Días de verano' tras el alud de criticas a TVE por su fichaje

Contreras ha explicado que dicho rótulo fue el causante de su salida del programa pero ha aclarado que "en ningún momento pedí que se me rotulase así, es más, si yo en algún momento lo hubiera pedido me hubiesen dicho que no".

"Me parece una putada, la verdad, porque es algo que me apetecía muchísimo, estaba encantado, y si es algo que yo meto la pata, pues asumo las consecuencias, pero por algo que es ajeno a la voluntad de todo el mundo y que nadie sabe muy bien como ha ocurrido", afirma Contreras en una entrevista en La Razón.

A pesar de su larga trayectoria en televisión, Julián Contreras también lamenta no haber conseguido mantenerse dentro del medio, creyendo que hubiese tenido más éxito si hubiese seguido hablando de su familia, algo que nunca ha querido: "Yo lo llevo intentando siempre, pero la gente no me ve haciendo otra cosa que no sea lo que yo no quiero hacer, la gente piensa que yo no estoy capacitado para participar en un programa de debate ni de política ni de nada".

"No hay oportunidad, soy un bufón de la tele, que es en lo que nos ha convertido la tele a todos los que nacimos en la tele. Un bufón, aprovechado y frívolo, que se ríe del pobre espectador que madruga para ir a trabajar", confiesa con amargura e ironía en la entrevista.