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Caso Errejón

Íñigo Errejón imputado por agresión sexual: el juez admite la denuncia de Elisa Mouliáa

El magistrado Adolfo Carretero se declara competente para investigar la denuncia que presentó la actriz y cita al ex portavoz de Sumar como investigado por un presunto delito con 1 a 5 años de cárcel

La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, con Iñigo Errejón

La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, con Iñigo ErrejónEDUARDO PARRA

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Íñigo Errejón ya está imputado. El juez Adolfo Carretero se ha declarado competente para investigar la denuncia que presentó la actriz Elisa Mouliáa contra el ex diputado Íñigo Errejón y citará a declarar como investigado por un presunto delito contra la libertad sexual.

El titular del Juzgado de Instrucción Número 47 de Madrid investigará los hechos denunciados por la actriz Elisa Mouliáa el pasado 24 de octubre ante la Unidad de Familia y Mujer de la Policía Nacional que podrían ser constitutivos de un delito de agresión sexual castigado con penas que van de 1 a 5 años de cárcel.

La decisión del juez Adolfo Carretero tiene lugar después de que esta misma semana preguntara al Congreso si Íñigo Errejón ya no gozaba de la condición de diputado. La Cámara Baja contestó que el ex portavoz de Sumar había abandonado el escaño, por lo que el juez se ha declarado competente para llevar el caso.

El juez Adolfo Carretero no ha fijado fecha aún para que Íñigo Errejón vaya al juzgado, pero está previsto que escuche primero a Elisa Mouliáa y luego al fundador de Podemos.

En la denuncia, Elisa Mouliáa relata hechos que tuvieron lugar una noche de finales de septiembre de 2021 cuando, después de que “llevarán aproximadamente un año hablando por redes sociales”, el Íñigo Errejón invitó a la actriz a la presentación de su libro. Al terminar el evento, se fueron a tomar unas cervezas a un bar cercano y Elisa Mouliáa, que ya tenía previsto acudir esa noche a una fiesta en casa de un amigo, le invitó a acompañarla.

Elisa Mouliáa señala que ya en el coche Íñigo Errejón "adoptó una actitud dominante" y en el ascensor directamente "la cogió fuertemente de la cintura y la besó de forma violenta dejándola sin respiración". Una vez en la fiesta y, tras bailar y charlar, fueron "por la fuerza a una habitación, donde se habrían producido varios tocamientos sin consentimiento", donde el ex portavoz de Sumar “le quitó el sujetador, profirió frases lascivas del tipo cómo me pones y acto seguido la empujó sobre la cama”.

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