Begoña, Sánchez y las putas de Ábalos

Ya no es rumor, es relato con nombres y apellidos: Begoña Gómez intervino en la caída de José Luis Ábalos. La esposa del presidente pidió a Sánchez que apartara a su ministro tras el aviso de Carolina Perles (la que fuera mujer de Ábalos) a las feministas del PSOE: “No podemos mantener a un putero como número tres”.

El episodio revela dos cosas graves. La primera: que Sánchez conocía desde 2020 la vida disoluta de su hombre fuerte, la del ministro de Transportes y secretario de Organización del PSOE. Y miró para otro lado. La segunda: que en La Moncloa no solo decide el presidente, también su mujer.

El socialismo que presume de feminista calló años mientras el escándalo crecía. Carmen Calvo, Adriana Lastra, Maritcha Ruiz... todas recibieron el aviso. Todas guardaron silencio. Hasta que fue insostenible.

Ábalos cayó, pero no por ética. Cayó porque ya quemaba. Y porque en Palacio decidieron sacrificarlo. Además, no se olvide, en 2023 volvió a figurar en las listas socialistas al Congreso de los Diputados.

El PSOE se llena la boca de igualdad y transparencia. Pero protege a los suyos hasta el límite de lo indecente. Y cuando no queda salida, lo venden como regeneración. Lo de Ábalos no fue limpieza. Fue un ajuste de cuentas interno. Y con la rúbrica de Begoña.

A. M. BEAUMONT