Mazón baja los humos a Morant y le tiende la mano para "avanzar"

El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha dado respuesta a los ataques de la líder del PSPV Diana Morant, que le acusa de "defender el franquismo" con la ley de la Concordia y amenaza con llevarla ante los tribunales. El jefe del Ejecutivo le ha pedido que se deje de "fanatismo", le recuerda que existen otras alternativas -como presentar enmiendas al proyecto de ley- y le tiende la mano para abordar temas relevantes para la Comunidad Valenciana como el agua o la financiación. 

Ha pasado tan solo un día desde que Morant se proclamara nueva secretaria general del PSPV y el enfrentamiento ya es tal que amenaza con llevar al Gobierno ante el Tribunal Constitucional por el proyecto de ley, aún no aprobado, que amplia el periodo de la investigación de "casos sin resolver" y exhumaciones de las víctimas ala Segunda República y a las de ETA, antes no incluidas en la ley botánica de Memoria Democrática.

Esa actitud "fanática",  sin "ni siquiera de escuchar" o abrirse "al diálogo" es la que Mazón le ha reprochado en su primer día como líder de los socialistas valencianos. Mazón ha ha apuntado que si a algún partido "no le gusta un borrador de ley, tiene todas las opciones del mundo para hacer sus aportaciones y hablar de ellas", ya que ha añadido que su formación "nunca" ha tenido "falta de voluntad de diálogo".  "Dejemos del y tú más de esta partida de tenis y de estos calificativos que no son muy edificantes", le ha pedido.

Morant también ha cargado contra la ley de libertad educativa que recupera la línea en castellano en los centros educativos para que sea posible elegir en que lengua estudiar el resto de materias. Una norma no aprobada y que no entrará en vigor hasta el curso 2025-2026, pero que también ya la dirigente socialista  y ministra de Ciencia advierte que intentará llevar ante el Constitucional. 

En relación a la ley de libertad educativa, Mazón ha abogado por "avanzar en libertad" para que las madres y los padres "tengan las posibilidades que durante mucho tiempo se les ha negado, que no tengan una policía lingüística vigilándoles como han tenido hasta la fecha y que sea compatible con la promoción del valenciano", que a su juicio es lo que su Gobierno está haciendo.

"No me gustaría que nos perdiéramos ningún médico, ningún abogado, ningún fisioterapeuta, ningún técnico especial por un asunto de lengua, porque entonces nos estaría separando en vez de que nos estuviera uniendo. Yo creo que la lengua nos tiene que unir. Hay que promocionarla desde la libertad, porque imponiéndola se dividen las sociedades", ha zanjado el jefe del Consell.