| 27 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
El ´Encuentre´de Cheste constituye una celebración muy arraigada que se ha echado de menos este año
El ´Encuentre´de Cheste constituye una celebración muy arraigada que se ha echado de menos este año

Señas de identidad que el confinamiento agranda

¿Por qué será que creo que en este tiempo, ya un mes, los vínculos culturales, territoriales, religiosos y de costumbres  los sentimos más intensos?

| Sagrario Sánchez Edición Valencia

¿Por qué apetece contactar con los amigos, familiares, compañeros, que hace tiempo no hemos visto, y no sabemos nada de su vida?

¿Por qué nos acurrucamos con los recuerdos de años anteriores, lejanos, olvidados,  pensábamos,  hasta ahora?

¡Qué nostalgia la nuestra! Habrá sido el parón de la dinámica y las prisas, habrá sido el sacar y limpiar cajones,  o el arreglo de la cómoda antigua, hoy restaurada, que contiene el ajuar bordado con iniciales de ellas, mi abuela, mi madre, una tía,…y sus fotos, las de antes,  de las celebraciones, las bodas, cumpleaños, las fiestas del pueblo, y hasta algún disfraz de cuando yo era pequeña.

Y casi  se me pasa la mañana,  cuando las campanas del campanario de Cheste comienzan a sonar, con volteo festivo, y me recuerdan que es domingo de Pascua de Resurección, es la hora del “encuentre”. Ya se ha producido: la Virgen de la Soledad  (Patrona de Cheste) es descubierta ante la presencia de su Hijo resucitado, Jesús, y acaba de hacerle las tres reverencias. Y se produce la suelta de palomas, y la “traca”. Y todos hemos aplaudido, abarrotando la plaza del ayuntamiento.

Y se me ponen los pelos de punta, cuando lo recuerdo. ¡Cómo me hubiese gustado vivirlo también este año!  Asumo un firme compromiso conmigo y con mi pueblo, para no perdérmelo jamás, porque es bonito, sincero, y emocionante, y me vincula con mis orígenes.

Es la esencia de las cosas, de la vida, de nuestra existencia. Algo que siento que nos quieren quitar  actualmente los que nos gobiernan. Y sinceramente creo que esta crisis va fortaleciéndolo cada día más ese vínculo. Y si no, pensemos en cuando vemos los datos de contagios, de fallecimientos , de recuperaciones. Primero pensamos en lo local, no tenemos datos, pero el boca a boca funciona. Luego mi provincia, Valencia, seguidamente en mi Comunidad y, a continuación, en el total de España.

Y nos producen alegría o tristeza las situaciones con las que a menudo nos identificamos,  y miramos a Madrid, al País Vasco, a Cataluña, deseando que pase, pensando cuándo nos veremos, y lo felices que nos hará.  

Queremos que los valencianos celebremos las Fallas, la Magdalena y las Hogueras, que los andaluces puedan disfrutar de sus Ferias y la Semana Santa,  que se reanuden los conciertos, las actividades teatrales, los espectáculos y las cenas. Y que podamos ir todos de aquí para allá, a conocernos un poco mejor. España es rica y variada.

Siento optimismo en la gente, siento solidaridad,  mucha humanidad, incluso alegría, y por ello he decido dejar de ver la televisión, no lo considero una buena fuente de información en este momento.  No puedo con las ruedas de prensa interminables, que no dicen nada,  salvo lo que sabemos que no es cierto,  percibo que quieren enfrentarnos entre nosotros,  que intentan manipularnos, y en ocasiones hasta anularnos. 

Me produce más confianza el agricultor que oigo todas las mañanas pasar bien temprano,  desinfectando mi calle, o el policía que pasa intentando ayudar, o la enfermera o auxiliar que se deja a sus hijos por cumplir con su trabajo, y por supuesto, con el médico que a menudo saludaba de pasada, y hoy le hago una reverencia. Todos ellos merecen nuestro agradecimiento, y me dan mucha tranquilidad.

De momento porque lo necesito, seguiré soñando con aquellas Pascuas. Hoy ya es lunes y después de visitar nosotros ayer al pueblo vecino, Chiva, hoy vienen ellos a Cheste, a comerse “la mona”, y se organizan juegos en la plaza, sobre todo saltamos a la cuerda, es lo más típico en estos días, y si es en el campo volaremos “el cachirulo”, o a pillar, o a adivinanzas, …cualquier juego que es capaz de dar participación a muchos.

Y en estos días, en  este confinamiento necesario, nosotros haremos que la parte social esté más viva que nunca. Y nuestros lazos de unión, sean más que nuestras diferencias, ya que nos han demostrado una vez más, que unidos somos más FUERTES.