| 19 de Mayo de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Celta-Levante
Celta-Levante

El Levante pierde en el norte

RC Celta 4 - Levante UD 2. En un duelo propicio para dar minutos a los menos habituales, los granotas alcanzaban el final de su maravilloso trayecto.

| Carlos Botey Edición Valencia

Los principales temas de conversación en torno al levantinismo durante la semana pasaban por las renovaciones de Lerma, Morales o Cabaco; la construcción de la nueva Ciudad Deportiva en Nazaret y, por supuesto, un triunfo como el del pasado domingo frente al FC Barcelona cuyos ecos aún tardarán en apagarse.

Entre medias de toda esta vorágine, los de Paco López debían cerrar la competición liguera en Balaídos. Y lo hacían, de entrada, sin jugadores de la talla de Bardhi, Boateng o el propio Jefferson Lerma. Era obvio que el planteamiento distaba del que se pondría en práctica en otras circunstancias; aunque precisamente uno de los menos habituales como Rubén Rochina adelantaría a los pocos minutos al Levante UD mediante un golazo adornado con perfecta maniobra y potente disparo a la escuadra.

A partir de ahí, el Celta resultó superior. Unzué sí puso toda la carne en el asador como su once inicial ya indicaba.

Maxi Gómez primero, y Iago Aspas después se encargarían de poner ya un electrónico favorable a las huestes celestes en el intermedio.

Situación que no haría sino acrecentarse en los primeros minutos de la reanudación, al aprovechar el propio delantero internacional español un error en la salida de balón granota.

Dentro de una ofensiva local que por momentos alcanzaba el calificativo de torbellino, destacaba el futuro fichaje valencianista Daniel Wass, mediante sus llegadas desde segunda línea y conexión de sus envíos con los puntas; así fue como llego el 4-1, otra vez obra de Maxi Gómez.

José Luis Morales - alcanzando la nada desdeñable cifra de 10 goles - recortó distancias a un cuarto de la hora de la finalización del choque, refrendando así no solamente el magnífico estado de forma con el que el extremo madrileño ha terminado la temporada, sino también el de un conjunto que ha logrado materializar, al menos, dos tantos en todos y cada uno de los cinco últimos partidos de la competición. Ahí es nada.