Catalá envía un mensaje a Camps y desvela su futuro si gana la alcaldía

María José Catalá está de baja por su maternidad y mantiene una actividad baja desde el congreso del PPCV que encumbró como líder a Carlos Mazón, con ella misma de secretaria general. Pero Catalá ha roto su silencio en el programa de Juanma Domenech y habla de todos los temas sin tapujos y a calzón quitado. 

La también portavoz del PP en Valencia comienza asegurando que su prioridad es la alcaldía de Valencia y que, si la gana, dejará sus responsabilidades orgánicas. Ojo, orgánicas, es decir, los cargos de partido como secretaria general. Pero no por ejemplo él acta de diputada y recuerda que Rita Barberá también era diputada y aprovechaba para ir a Les Corts y “pasar revista a lo consellers”.

Sobre el run run que lleva circulando semanas de que puede asumir la portavocía del grupo popular en Les Corts, Catalá no lo descarta, pero tampoco lo confirma, y lo fía a una reunión que tengan en septiembre para decidirlo. Ella misma incluso apunta otros nombres en caso de que no sea como Miguel Barrachina.  

Sobre el espinoso tema de Paco Camps, Catalá confiesa que tenía una buena relación con él y que quedaban a comer para intercambiar impresiones, pero que no ha entendido los movimientos que ha hecho en los últimos meses postulándose a la alcaldía de Valencia. Y además lanza un mensaje: la candidatura a la alcaldía la decide Génova ("no habrá primarias"), así que Camps no tiene nada que hacer. 

La número dos del PPCV tiene también palabras para José Vicente Anaya, rival de Mazón en las primarias y amigo personal de la propia Catalá. La portavoz del PP en Valencia admite que le dijo “que se estaba equivocando” presentando su candidatura, aunque resalta que sigue siendo un activo en el partido como alcalde de Ayora y que espera seguir contando con él.

Isabel Bonig también es otra de las señaladas en las confesiones de Catalá en la 99.9. La secretaria general del PPCV alaba que Bonig “dejara un partido unido y con las cuentas saneadas”. Aquí, con Bonig, no muestra ningún pero, sólo buenas palabras.