Casado pone en evidencia al Gobierno de Puig con su compromiso electoral

Pablo Casado aprovechó el último día de Fallas en Valencia para comprometerse en cambiar el modelo de financiación autonómica si logra ser presidente tras los comicios del 28 de abril. El actual sistema, dijo, "está siendo tremendamente lesivo para los intereses" de la Comunitat porque "no refleja el crecimiento demográfico ni las necesidades de esta tierra". El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, también defendió un día antes en Valencia reformar la financiación por un nuevo "justo y transparente".

El presidente del PP recordó que el actual sistema "lo aprobó el PSOE" sin que el  presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que era diputado en el Congreso "dijera nada" en contra.

"Lo dijimos en 2009, que era sectario y que quería atacar a la Comunitat Valenciana, a Murcia, a Baleares y a Madrid porque es donde gobernaba el PP", soltó Casado.

Los socialistas valencianos ha acusado el golpe. Su vicesecretario general del PSPV-PSOE, Manolo Mata, reaccionó de inmediato y aseguró  que "cuando la derecha se da codazos en el mismo carril está bien que al menos se oiga una y mil veces que somos la comunidad peor financiada".

La reforma de la financiación autonómica ha sido la prioridad para el Gobierno de Puig quien mantuvo esta legislatura un tono muy reivindicativo hasta el acceso al poder de Pedro Sánchez.

Camarote de los Hermanos Marx

Mata, la mano derecha de Puig, sostuvo, con todo, que "hay muchas dudas que despejar sobre el cambio en el modelo de financiación que comenta la derecha" ya que, según ha remarcado Mata, "deberán explicar qué quieren hacer con la deuda histórica vinculada a la infrafinanciación o cuáles son los criterios que van operar para mejorar el sistema de financiación", ha sentenciado. El portavoz en el parlamento valenciano mantuvo que es curioso que el "Camarote de los Hermanos Marx en que ha convertido la derecha española ahora se peleen por intentar modificar nuestro sistema de financiación".