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La presidencia del Puerto de Valencia: la ‘patata caliente’ por nombrar de Mazón
Con la ampliación en el horizonte en un momento en el que el Gobierno puede depender de independentistas catalanes, la presidencia de la APV es un puesto clave con muchos intereses
La Generalitat Valenciana aún tiene un 30% de sus altos cargos por nombrar, pero hay uno en especial en el que hay muchos intereses en juego y donde Carlos Mazón, quien tiene la última palabra, debe dar en el clavo con la persona adecuada: la presidencia del Puerto de Valencia.
A muchos les llamó la atención que el presidente de la Generalitat nombrara al presidente del Puerto de Castellón, cargo que recayó en Rubén Ibáñez, pero que se dejara sin nombrar el del puerto de Valencia, que aún ostenta el socialista Joan Calabuig.
Y es que la presidencia de la Autoridad Portuaria de Valencia no es un simple cargo y requiere acertar la tecla. Primero, con una persona del agrado de los empresarios y en particular de Vicente Boluda, presidente de AVE y uno del naviero con más negocios en el puerto. Segundo, que cuente además con el visto bueno de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, en un cargo de suma importancia para la ciudad donde hay inversiones estratégicas.
Además, que sea una persona que sepa afrontar los retos del puerto como la ampliación norte, en un momento en el que el Gobierno de España, quien tiene que dar el visto bueno definitivo, puede acabar dependiendo de los independentistas catalanes de ERC y Junts, y con ello poner palos en las ruedas del puerto de Valencia. Carlos Mazón debe deshojar una margarita de uno de los cargos además más deseados por su prestigio y mejor remunerados.
