| 29 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Logo de la campaña "End the cage age"
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"End The Cage Age"

Este pasado viernes, 13 de octubre, se conmemoró el día mundial contra las jaulas. 300 millones de animales viven confinados en jaulas en Europa.

| Raquel Aguilar Edición Valencia

300 millones de animales, sí una cifra difícil de asimilar (más de 6 veces las personas que vivimos en España) viven confinados en jaulas en Europa. Esta cifra cuenta sólo a los animales considerados “de granja”. No se han contabilizado animales prisioneros en acuarios y zoológicos, ni los hacinados en piscifactorías, ni los que malviven en jaulas y peceras como si fuesen un mero objeto de decoración, ni los que se enjaulan para que críen constantemente para vender a sus hijos como objetos de decoración, ni aquellos con los que se experimenta, ni los que se utilizan para apostar en carreras, ni los que viven en mugrientos zulos esperando ser armas de caza, ni los que esperan a ser gaseados en las granjas peleteras,…

Como ves, esta cifra podría multiplicarse hasta el infinito y más allá. Porque son millones los animales que, sólo en Europa, ven pasar sus días en diminutas jaulas, esperando que la muerte les libere de un cautiverio injusto, innecesario y despiadado.

No obstante, me voy a centrar en los animales que “comemos”. Si la industria ganadera supone una vida de sufrimiento impuesto para los animales, cuando éstos deben además pasarla en minúsculas jaulas, en las que apenas pueden moverse ni expresar ningún comportamiento natural, este sufrimiento se magnifica.

Para la industria ganadera los animales son meros “productos” con los que hacer negocio. Pero la diferencia con un ladrillo, un taladro o un vehículo, es que los animales, tienen capacidad de sentir y sufrir, como tú y como yo, y una mayor rentabilidad implica un sufrimiento creciente.

Por este motivo, 1.400.000 personas y 170 organizaciones solicitamos en 2020 a la Unión Europea, mediante la iniciativa ciudadana europea “End The Cage Age”, que ponga fin a las jaulas progresivamente, hasta su eliminación total en 2027. Evidentemente, los productos importados por la UE deben cumplir los mismos requisitos.

Con esta iniciativa, la Comisión Europea se comprometió a presentar una propuesta legislativa para finales de 2023. Sin embargo, en su discurso sobre el Estado de la Unión, la presidenta del Consejo, Úrsula Von der Leyen, obvió esta cuestión, lanzando en su lugar guiños al lobby que forman grandes corporaciones de ganadería industrial y, a punto de expirar el plazo, seguimos esperando una propuesta que represente una Europa democrática y transparente, que legisle en base a principios éticos hacia los animales, como demanda la sociedad actual.

Porque la legislación europea en materia de animales, que en su momento fue muy relevante, ha quedado ya obsoleta y requiere grandes avances, entre ellos, el fin de las jaulas.

Estas leyes que demandamos, impedirían que las gallinas y los conejos, por poner un ejemplo, deban pasar toda su vida en espacios del tamaño de un folio, sin poder siquiera darse la vuelta. ¿Imaginas qué debe ser vivir así?

España, además, tiene el vergonzoso honor de ser el país europeo con mayor número de animales enjaulados, con el 88% de las gallinas ponedoras, el 99% de los conejos, el 88% de las cerdas en jaulas de gestación y el 98% de las cerdas en jaulas parideras, según datos de la organización Compassion in World Farming.

¿Qué podemos hacer la ciudadanía para ayudar a los animales en este sentido?

En primer lugar, reducir el consumo de carne, reemplazando las proteínas animales por proteínas de origen vegetal. En la actualidad es sencillo encontrar nutricionistas que acompañen en el proceso y conseguir recetas deliciosas y saludables, libres de sufrimiento.

En segundo lugar, investigar aquello que consumimos y rechazar los productos procedentes de animales enjaulados. Podemos hacer presión en redes sociales a quienes nos representan para que implementen medidas que incidan en unas mejores condiciones de vida para los animales.

Y hablar de los animales, visibilizar su situación e invitar a nuestro entorno cercano a actuar.

Por último, cuando votemos, consideremos también a los animales. En 2024 hay elecciones al Parlamento Europeo y con nuestro voto, podemos incidir sobre las leyes que deben proteger a los otros animales.

Pongamos fin a las jaulas.

#EndTheCageAge