El emocionado obituario de una periodista de El País a su marido fallecido

La redacción de El País está de luto por la muerte a temprana edad de Alejandro Bolaños Correa, periodista de su sección de Economía que tenía una gran ascendencia en la redacción. Y de ella formaba parte su mujer, la también periodista Tereixa Costenla, encargada de escribir un impactante obituario para despedir a su marido.

Bolaños, víctima a los 47 años de un cáncer de páncreas contra el que luchó con denuedo sin perder la sonrisa ni dejar de explicar los arcanos de la economía hasta a los más profanos, se despide en el papel que fue suyo con la pluma de quien más le conocía, autora de un emocionante texto que no ha dejado indiferente a nadie.

Un texto a flor de piel

"Estábamos juntos desde el año 2000. Tan juntos que trabajábamos en el mismo periódico y compartíamos un ir por la vida. Tan juntos que tuvimos cáncer al mismo tiempo (el mío de mama) y juntos acudimos a radioterapia y a alguna quimio. Juntos también nos construimos un muro contra el victimismo y el rencor. Teníamos cáncer, sí, pero nuestra vida estaba repleta de muchas otras cosas bellas. Hasta hoy. Porque se ha ido debido a procesos infecciosos, agravados por una recaída tumoral. Y pese al desgarro de este último mes, transcurrido en la UCI de los hospitales Clínico de Santiago y Gregorio Marañón, y a la dureza de estos últimos años, yo siento una inmensa gratitud por haberle conocido y acompañado durante 18 años. Él me hizo mejor".

Bolaños, en su perfil en Twitter

La periodista, con un esfuerzo sentimental a buen seguro inmenso,  no ha querido delegar en nadie un adiós escrito plagado de referencias a la persona, al periodista y al padre, con párrafos al borde del llanto que resumen la conmoción en la redacción del periódico madrileño.

Su vida y obra

"Adoraba a su hija Elba, nacida en 2009, igual de racional y bondadosa que el padre. Estaba unido a sus dos hermanos, Carlos y Javier, por el Atleti y toneladas de amor. Álex nació en Madrid, adonde se trasladaron sus padres desde Huelva. Economista como su hijo, Abilio Bolaños desarrolló casi toda su carrera profesional como directivo en Telefónica. Laura Correa se licenció en Historia en Sevilla y trabajó en distintos archivos y bibliotecas".

"Carecía de ambición individual –rechazó innumerables ofertas para ser jefe en el periódico-, mientras que desbordaba ambición colectiva. Le importaba más la influencia que el poder. E influía por la vía del diálogo y el debate constante, la búsqueda de otros puntos de vista, la defensa de un espíritu de equipo por encima de la firma personal".

Descanse en paz.