| 26 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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El separatismo empaña la manifestación por España por dos banderas

Que el acto en contra del "procés" ocupara el lugar reservado para las muestras de fuerza independentista no gustó. Ni el descrédito ni las acusaciones evitaron el éxito de los unionistas.

| ESdiario España

Entre un mar de banderas de España, el periodista del periódico La Vanguardia, Quico Sallés, localizó dos iconos franquistas que dieron pie a los independentistas para cargar contra todos aquellos que se hicieron eco del éxito del acto en contra del "procés" que se celebró este domingo en Barcelona. El mayor perjudicado por las críticas de los fieles a la hoja de ruta ideada por Artur Mas y los suyos fue el secretario de Estados de Asuntos Exteriores, Ignacio Ybáñez Rubio, al que varios activistas pro catalanistas acusaron en Twitter de difundir precisamente estas imágenes en las que aparecía la enseña anticonstitucional.  

La plaza de Sant Jaume, entre las sedes de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona fue el lugar elegido por la agrupación Societat Civil Catalana para organizar la primera manifestación en contra del independentismo de la era Puigdemont. Un coto privado hasta ahora para que los fieles al soberanismo hicieran sus demostraciones de fuerza. 

Unos 3.500 españoles, según los datos aportados por la Guardia Urbana de Barcelona, le dieron la vuelta a la proclama catalanista que desde hace años intenta convencer a todos de que España roba a los catalanes. 

Varias fotografías publicadas por Sallés en su Twitter personal confirman que las banderas "del águila" se colaron en la reivindicación pero no existe ninguna prueba que confirme la participación de Ybáñez en la divulgación o apoyo a las mismas tal y como le acusa la guerrilla tuitera fiel a los que manejan el Parlament. 

El acto se desarrolló sin incidentes a pesar de que los independentistas contraatacaron en las redes con mensajes que para ellos son un claro ejemplo de que "Madrid ens roba".  

El presidente de la organización, Rafael Arenas, destacó que la amenaza de la ruptura con España está tan viva como antes. Desde su punto de vista, un referéndum "no es más que un pretexto para continuar con el proceso infinito".

Tras los dos discursos programados el acto culminó emulando el estribillo de los independentistas pero con un matiz singular, esta vez "El procés ens roba" fue el mensaje destacado. La versión de Miguel Ríos de El himno de la alegría despidió las pancartas en las que se pudo leer "El proceso perjudica seriamente nuestra salud" o "El proceso, golpe al estado democrático". El acto fue un ataque directo a los símbolos independentistas que ni las críticas ni el descrédito pudieron empañar el éxito a pesar de los intentos.