Robles desautoriza a Calvo y abre otro cisma en Moncloa con el estado de alarma

En apenas 24 horas, la ministra de Defensa, Margarita Robles, -jurista de formación y carrera- ha desautorizado a la vicepresidenta Carmen Calvo y deja en evidencia el guirigay desatado por Pedro Sánchez al anunciar que el 9 de mayo pondrá fin al estado de alarma.

Tras la rebelión casi unánime de las Comunidades Autónomas ante la falta de un plan B, la número dos de Moncloa quiso este jueves utilizar la doctrina del Tribunal Supremo para corregir a los presidentes autónomicos al asegurar que la actual legislación ordinaria bastará para afrontar la pandemia tras el 9-M ya que, a su juicio, salvo para el confinamiento domiciliario, el estado de alarma es prescindible.

Sin embargo, Robles ha advertido este viernes que, "con carácter general", no pueden restringirse derechos fundamentales sin estado de alarma, aunque ha pedido no perderse en debates jurídicos que no dan "seguridad" a los ciudadanos.

En una entrevista en Antena 3,  Robles ha matizado que Sánchez dijo que su "intención" es no prorrogar el estado de alarma más allá del 9 de mayo. Sin embargo, ha pedido no enredarse en debates jurídicos que no dan "seguridad" a los ciudadanos.

La ministra ha explicado que en este ámbito "no hay una posición única" y el Derecho "no es una ciencia exacta", por lo que ha hecho "una llamada a la responsabilidad" y la unidad de todas las fuerzas políticas para prestar el mejor servicio a los ciudadanos "sin perderse en debates jurídicos". Justo lo que hizo este jueves Calvo.

En este contexto, ha reconocido que, "con carácter general", no se pueden limitar derechos fundamentales sin el estado de alarma, pero ha recordado que los propios tribunales "han hecho interpretaciones diferentes" y esos debates "no contribuyen a dar seguridad a los ciudadanos". Y ha puesto como ejemplo la posibilidad de prohibir fumar en las terrazas de los bares, que ha remarcado que no es un derecho fundamental.

Robles ha reconocido que algunas informaciones "contradictorias" han generado "confusión" entre la ciudadanía, pero cree que la "inmensa mayoría" de la población quiere vacunarse. De hecho, ha revelado que en las Fuerzas Armadas el porcentaje de rechazo a la vacuna no ha llegado al 3 por ciento.