Hallazgo histórico desde un pueblo de Jaén a través del primer molde para fabricar monedas de la Península
La Universidad de Jaén ha dado a conocer el descubrimiento en el yacimiento de Obulco. en Porcuna, de una pieza del siglo II a.C. que permite reconstruir un proceso hasta ahora invisible para la arqueología

Reconstrucción idealizada del taller de acuñación. En el círculo el molde descubierto en Obulco.
El yacimiento arqueológico de Obulco, situado en el municipio de Porcuna, en Jaén, ha dado una gran sorpresa a los investigadores y al resto del mundo, porque en él se ha descubierto "el primer molde de piedra para la producción de moneda documentado en la Península Ibérica". Pero es que además, el hallazgo desvela mucho más sobre la historia de este enclave, la antigua y poderosa ciudad de Obulco, ahora Porcuna, porque el molde está en su contexto, es decir donde se usaba hace 2.000 años para acuñar moneda.

Molde de piedra para la producción de moneda hallado en el yacimiento de Obulco, en Porcuna.
Un equipo del Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica y del Departamento de Geología de la Universidad de Jaén (UJA) ha sido el responsable del hallazgo de esta pieza, de más de 2.000 años de antigüedad, que corresponde a la mitad plana de un molde bivalvo usado para fabricar cospeles monetales; es decir, discos metálicos que luego eran acuñados como monedas, según ha informado este viernes la UJA.
Pero es que además, el molde de piedra "se trata de uno de los pocos encontrados en todo el mundo romano en contexto arqueológico". De tal manera, este descubrimiento permite reconstruir parte del proceso técnico de acuñación en época ibérica y republicana, hasta ahora invisible para la arqueología", ha explicado la investigadora posdoctoral del Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica, María Isabel Moreno.
El molde del siglo II a.C sitúa Obulco como un centro de acuñación
La investigación llevada a cabo desde el yacimiento de Porcuna permite documentar que, durante los siglos II y I a.C., el 'oppidum' de Obulco fue uno de los principales centros de acuñación de moneda en el sur peninsular, pero además de los más avanzados.
Al respecto , el también investigador posdoctoral Mario Gutiérrez ha explicado que "las monedas producidas allí muestran una notable evolución tanto iconográfica como lingüística, pasando de leyendas en escritura ibérica meridional a fórmulas latinas, reflejo del proceso de integración en las estructuras del poder romano".

Interior de la cisterna romana de la Calderona, recientemente rehabilitada en Porcuna, Jaén. ARQVIPO 10/7/2024
En concreto, el molde descubierto servía para crear cospeles que se acuñaban como ases de bronce. Su análisis metrológico indica que corresponde a monedas de gran módulo, de entre 32 y 35 milímetros de diámetro, lo que permite relacionarlo directamente con una serie concreta de ases producidos en la primera mitad del siglo II a.C., en un periodo clave de transición entre los sistemas políticos ibéricos y la dominación romana.
El estudio del molde ha implicado técnicas arqueológicas y científicas de alta precisión, con la colaboración del profesor del área de Geología de la UJA Ginés de Gea. En concreto, a través de petrografía, se ha determinado que "la piedra caliza utilizada es local, extraída de canteras de calcarenita de la unidad geológica de Porcuna".
"El análisis detallado de las marcas de uso presentes en su superficie nos permitió identificar marcas relacionadas con la fabricación del molde, su uso para la producción de monedas y su abandono causado por la fragmentación intencional del molde".
Además, "la microfluorescencia de rayos X reveló que las improntas metálicas presentan una aleación binaria de cobre y plomo, con una composición elemental similar a la de las monedas de Obulco"; mientras que "el análisis estadístico posibilitó comparar las improntas metálicas presentes en el molde con una base de datos de más de 700 monedas acuñadas en la ceca de Obulco".
"Esta comparación ha permitido identificar con precisión el tipo de monedas que se producían a partir de los cospeles elaborados con este molde", ha manifestado el investigador.
Un hallazgo "extraordinariamente" escaso y con un valor excepcional
El de Porcuna no sería el único centro emisor de moneda en la Hispania republicana que se conoce, ya que hay constancia de un centenar de ellos, sin embargo los datos arqueológicos sobre la ubicación concreta de las cecas dentro del urbanismo de estas ciudades "son extraordinariamente escasos". La mayoría de estos talleres son conocidos únicamente por las monedas que produjeron, sin que se hayan conservado evidencias materiales directas que permitan situarlos en el espacio.
"En ese sentido, el hallazgo del molde en el yacimiento de Obulco adquiere un valor excepcional. Fue documentado en una zona suburbana del 'oppidum', adyacente a la muralla y en el interior de un edificio republicano parcialmente excavado. Esta localización ofrece un indicio claro --y poco habitual-- sobre el emplazamiento físico de una ceca en época republicana, y refuerza la hipótesis de que el edificio pudo albergar actividades de acuñación entre los siglos II y I a.C.", ha subrayado Moreno.

Detalle de las gradas del anfiteatro romano de Obulco.
A diferencia de otros hallazgos de moldes monetales en el mundo romano, como los de Britannia, frecuentemente asociados a contextos liminales, rituales o de descarte simbólico, el molde de Obulco parece haber sido abandonado en el mismo lugar donde se utilizó. Esto otorga "un alto valor arqueológico al contexto y permite, por segunda vez en Hispania, tras el análisis de Carteia (Cádiz), plantear la localización física de una ceca monetal en su paisaje urbano a través de datos arqueológicos".
Un molde que desvela los profundos cambios de la época
Los investigadores del Instituto de Arqueología Ibérica de la UJA han resaltado que este molde no es solo una herramienta técnica, es también un símbolo de los profundos cambios que vivieron las comunidades ibéricas tras la conquista romana. Las monedas acuñadas con él llevaban los nombres de magistrados locales en escritura ibérica meridional, pero también el topónimo latino Obvulco, ilustrando un momento de profundas transformaciones entre tradiciones.
Los interesados en conocer más sobre este hallazgo pueden dirigirse al artículo científico que ha sido publicado en la revista internacional 'Journal of archaeological science: Reports (Elsevier), y se enmarca tanto en el proyecto 'Materialidad, identidad y memoria en la iconografía ibera del Alto Guadalquivir: estrategias post-Segunda Guerra Púnica', financiado por el Plan Andaluz de Investigación, Desarrollo e Innovación de la Junta de Andalucía; como en el proyecto 'PostColonial_ID. Arqueología multiescalar del imperialismo romano en el Alto Guadalquivir a través del fenómeno colonial, financiado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y cofinanciado por el Fondo Social Europeo Plus.