El congreso de Castellón y el "error" de Casado con Valencia

El PP trata de cerrar el proceso de renovación del partido con un calendario que sigue sometido a la evolución del virus tan letal en la tercera ola en la Comunitat Valenciana, que ha segado la vida de  6.100 persons, en su mayoría en los últimos dos meses.

En julio pasado, en Alicante y Valencia se nombraron a los nuevos presidentes, Carlos Mazón y Vicente Mompó, respectivamente, y así se lograba pasaba página a los gobiernos de gestora.

El caso de Castellón es diferente. La dirección de Miguel Barrachina no es provisional. El diputado en les Corts fue elegido en mayo de 2017 para el cargo orgánico provincial, sin que se presentara alternativa alguna, como ocurrió luego con Mazón o Mompó.

La convocatoria del congreso de Castellón es inminente. Lo que está por ver si es la estrategia de Teodoro García Egea en esta provincia pasa por la renovación o si sigue confiando en un cargo con recorrido, tras pasar por la política local (Segorbe), nacional (diputado y alto cargo en el Ministerio de Zaplana) y ahora en la autonómica. La lideresa Isabel Bonig, castellonense, no tiene duda alguna de que debe continuar. No estaría encuadrada en ese grupo de apoyos la senadora con mando en plaza (secretaria general) Salomé Pradas.

Barrachina, tras al fracaso de las elecciones y la pérdida de la Diputación, difícilmente revalidaría el 99%  de síes en su elección. Castellón, sabido es, resulta determinante  en los congresos del PPCV. Así ocurrió con el ascenso de Zaplana o de Camps. 

Tensión en el PP valenciano ante la inminencia de los congresos que marcarán sus liderazgos

Un tuit en las últimas horas de García Egea ha contribuido más si cabe a desatar los nervios y  especulaciones en una organización pendiente del "gran congreso" regional. El número dos del PP felicitaba a su amigo Mazón por la decisión de cubrir las cuotas de autónomos y los gastos de luz en las ayudas de la Diputación de Alicante a la hostelería. El tuit fue de este miércoles, mientras que el acuerdo de la corporación provincial se hizo público la semana pasada. 

La convención nacional y el congreso regional

Pablo Casado anunció el martes, tras el desastre electoral en Cataluña, que habría una convención nacional en otoño. La incógnita por despejar ahora es: ¿el congreso regional se adelantará a verano y de esta forma al evento ya irá el líder o lideresa que debe batirse en las elecciones autonómicas del 2023? Como aderezo al calendario, el rumor de que Ximo Puig volvería a adelantar los comicios si la pandemia remite y la economía toma velocidad de crucero.

El propio Casado, en la misma intervención posfracaso, patinó en su referencia a Valencia. "Hace un año, Podemos superó al PSOE en Madrid, Barcelona, Valencia, Cádiz", dijo. La realidad es que Podemos  perdió los tres concejales que tenía en la capital valenciana. Las elecciones las ganó Compromís (Ribó), y no Podemos, formación esta última intrascendente en la política del cap i casal y con camino similar en el resto de capitales valencianas.