José Pablo López, el hombre de la lista negra a periodistas, nuevo presidente de RTVE

Hasta hace tres meses fue la mano derecha de la saliente presidente de RTVE, Elena Sánchez. José Pablo López era el director general de contenidos del ente público durante su mandato. Sánchez toma la decisión de cargárselo por las decisiones empresariales de un alto coste para la televisión pública. Días después es destituida. Esta semana, López ha sido premiado con el puesto de su antecesora jefa. José Pablo fue el responsable de contratar a David Broncano en TVE con La Revuelta por una millonada durante dos años. Objetivo, combatir a Pablo Motos. Sin miramiento. López quiso contratar a Belén Esteban. Sánchez se negó. El conflicto estaba creado. Y López fue a la calle y a Sánchez la destituyeron. La estrategia estaba cantada. Esta semana se ha conocido.

José Pablo López ha sido elegido por el Congreso de los Diputados con votación del PSOE y sus seis socios de gobierno. Fuera Elena Sánchez y ahora el hombre todopoderoso es su segundo. El irse una vez fue la forma de volver por la puerta grande. Una televisión que cuesta mucho dinero a todos los españoles y nunca supera a Antena 3. Telecinco es otra historia. López tiene una fijación con la televisión que tanto denostaron, Sálvame y malas copias del original. 

Ahora bien, en la agenda de López cuenta con una lista negra de periodistas que no pueden trabajar en RTVE por no fariseos políticos y no defender a ultranza los puntos violetas en la época de Rocío Carrasco y su cuento chino. Algo que defendió con capote su gobierno socialista. Tan sólo perfiles apolíticos o políticos en silencio tienen acceso. En su lista tiene nombres propios. Todo el que haya hecho una defensa de Isabel Díaz Ayuso tiene una cruz en su cadena, TVE. Así lo hizo saber en el programa Mañaneros. 

José Pablo López fue el niño bonito del grupo parlamentario Ciudadanos en el gobierno, y corto, de PP y Ciudadanos entre 2019-2021 en la Comunidad de Madrid. El vicepresidente (Cs) fue Ignacio Aguado. La disolución de las cortes en la Comunidad de Madrid y nuevas elecciones permiten que salga del gobierno. Ya no son nadie. Ni en la comunidad ni en la televisión pública madrileña. López tiene que salir después de unos años donde se implantan productoras amigas en la cadena para mejor rédito del medio de comunicación. Era la intención. Otra cosa es la realidad. La privatización absoluta de la cadena de Madrid. La producción pública se la carga de un plumazo. No interesa. Las productoras traen mayores intereses para todas la partes. López es expulsado con el gobierno casi absoluto de Díaz Ayuso en 2021. Fuera. En 2023 consigue la mayoría absoluta. Y mucho menos iba a ser llamado al reino de la diosa política. Como algunos la llamaban.

López encuentra hueco entre los socialistas. Es enemigo de Ayuso y todos los que la apoyen, serán sus nuevos enemigos. Digo y hecho. El gobierno socialista de Pedro Sánchez tiene a su mejor aliado, José Pablo López. Y ahora ha llegado su momento. Un regalo, presidente de RTVE. Más socialismo. Más servilismo y más silencio si quieres seguir trabajando en una televisión que tiene y debe tener como objetivo el interés público. Únicamente. De nuevo, dicho y hecho. Ahí va. Para esto el mejor. Aún lo recuerdan el tiempo que deambuló por la cadena La Sexta y la plataforma televisiva de la cadena COPE. España progresa. Y mucho. De pinta de seminarista a ser el brazo ejecutivo del socialismo televisivo. A las aguas mansas siempre hay que tenerles respeto. A las fieras, con el verbo vale.