El "deluxe" supera los problemas de los Matamoros con escatología pura

Empiezan las sinergias entre lo mejor de cada casa, y nunca mejor dicho. Si Mediaset colocó a los hijos de Makoke y Kiko Matamoros -hijastros entre ellos- en GH Vip no fue por casualidad. Las cosas han comenzado a correr y todo parece indicar que la relación entre Laura Matamoros y su padre servirá para dar aire a ambos programas. 

Por lo pronto, la joven se confesaba ante su hermanastro, Javier Tudela, hijo de Makoke, asegurando que la "barrera" existente entre su padre y ella no tenía nada que ver con la pareja de su progenitor, que las cosas venían de mucho tiempo atrás. 

Al colaborador de Sálvame se le abrían las carnes, y no precisamente para una operación estética, asegurando que él, como padre, siempre había hecho frente a todos los problemas económicos de sus hijos. Como si el dinero lo comprara todo...

Así que anoten lo que está por venir. Porque el resto del Deluxe volvió a ser, una vez más, lo mismo y lo mismo: que si la histérica Ylenia haciéndose la graciosa y sacando la choni que lleva dentro con Toño Sanchís y Agustín, las obsesiones sexuales del marido de Chiqui, etc. 

Hasta en el polígrafo se superaron con una pregunta a Sofía, la ganadora de GH 16, sobre cómo se limpia el ano su madre después de hacer sus cosas. La joven confirmó que su madre tarda quince minutos en hacerlo porque en la zona se acumulan "muchas toxinas". Palabras textuales. 

Para ahondar en el asunto, y luego dirán que no les gusta el tema, Kiko Hernández hizo hasta una demostración sobre la obsesión de la dama en cuestión por limpiarse el desagüe: que si se introduce el dedo por ahí y durante quince minutos se dedica a ejercitar la limpieza de la zona. 

A todo esto, Belén Esteban, a gritos y con su educación habitual, escandalizada por la forma de la señora de llevar a cabo la higiene de su parte íntima. Se lo pueden imaginar.