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El reencuentro más esperado entre los Pantoja y los Rivera, más cerca que nunca
La boda de Kiko Rivera e Irene Rosales será la excusa para reunir, por primera vez tras muchos años, a la familia Rivera y a los Pantoja.
Kiko Rivera está feliz. Al menos es lo que se entiende de su exclusiva en la revista Hola en la que, junto a Irene Rosales, anuncia que contraerá matrimonio el próximo 7 de octubre. El hijo de Isabel Pantoja asegura que a la ceremonia acudirá su madre y todos sus hermanos, incluida Chabelita con la que, es vox populi, mantiene una relación de ida y vuelta: "será el primer encuentro de mis hermanos con mi madre (que ejercerá de madrina) después de mucho tiempo".
Aunque la pareja había barajado la posibilidad de contraer matrimonio en Cantora, finalmente lo harán en Sevilla
Durante la entrevista, realizada por la siempre elegante Roseta del Valle, Kiko asegura que su madre está muy feliz ante la noticia "porque después de la trayectoria que tengo, que todos hemos pasado por etapas y ahora me ha llegado está más tranquila. Ella ve que he encontrado a la mujer perfecta para mí". Aunque pudiera ser una buena opción, Kiko e Irene han decidido que su boda no tendrá lugar en Cantora "porque muchos de nuestros invitados son de Sevilla. Además, hubiera hecho falta una reforma".
El hijo de la tonadillera reconoce que las informaciones delicadas sobre su situación sentimental le han pasado factura
Aunque Rivera se enorgullece de que ha sentado la cabeza, que "soy otra persona totalmente diferente", durante la conversación también reconoce que las informaciones sobre sus continuas infidelidades han afectado a su relación "hemos tenido nuestros más y nuestros menos, pero el amor siempre sale ganador. Nos tenemos el máximo respeto. El mejor consejo que me ha dado ni madre es que, por mucho que podamos discutir, nunca nos vayamos a dormir sin haber arreglado las cosas".
